Nwakali comienza a ver la luz al final del túnel de su lesión

«Se siente bien volver a estar fuera otra vez». Con esas palabras en sus redes sociales el centrocampista de la Sociedad Deportiva Ponferradina Kelechi Nwakali anunciaba su regreso al trabajo en el anexo del Toralín, del que había estado apartado desde que se lesionase en el partido ante el Málaga del pasado 26 de noviembre, cuando sufría una dura entrada en la que quedaba dañada su rodilla derecha. Un par de días después y sin parte médico oficial por parte del club, el propio futbolista nigeriano confirmaba su intención de regresar a los terrenos de juego en 3 semanas, un periodo que finalmente se ha alargado un poco más, pero que espera concluir con el mediocentro estando disponible este viernes para que David Gallego pueda utilizarlo, quizás no de inicio, pero sí durante el encuentro, en la visita del Villarreal B al Toralín.

Se ha perdido 4 partidos hasta el momento Nwakali, sin duda uno de los jugadores más destacados en la primera parte de la temporada en una Ponferradina necesitada de ese jugador diferente que sin duda es el centrocampista, que en muchos partidos ha sido el faro ofensivo del equipo. Agus Medina, que la temporada pasada había ocupado esa posición a un enorme nivel, no ha sido capaz de igualarlo en esta temporada y si bien ha jugado también en la medular con jugadores con un corte más defensivo como Sabit o Erik Morán, también ha ocupado la posición de mediapunta en la que circunstancialmente ha jugado el propio Nwakali.

Necesita por tanto recuperar al mejor Nwakali la Ponferradina, que fue fijo para Gomes, pero apenas ha tenido la oportunidad de conocer de cerca los nuevos sistemas de David Gallego al haber aparecido esta misma semana sobre el terreno de juego buscando recuperar el tiempo perdido.