Y es que explicó el director general que la entidad catarí «esta más ilusionada, asentada y comprometida que nunca con la Cultural, es el momento en el que más proyectos presentes y futuros tienen en mente y si no se cree lo que yo digo se le puede preguntar también al alcalde, que ha estado en Catar hablando con el presidente para conocer inversiones que se van a hacer y buscando más». Además, aseguró Llamazares que Aspire «no tiene intención de compartir la propiedad ni mucho menos quedarse siendo un accionista minoritario esencialmente porque no es su forma de trabajar, ninguno de los clubes que tienen es bajo esa fórmula». Lamentó que «en los últimos 10 años siempre se ha cuestionado lo que han hecho y no disfrutamos del día a día, Aspire sigue apostando por la Cultural, la afición tiene que estar tranquila».
El director general cifró en 3 millones de euros el presupuesto para la presente temporada tras un año que se cerró de nuevo sin pérdidas gracias a la aportación de la propiedad, que pone en torno a la mitad de ese dinero. Trata de crecer la Cultural en ese aspecto, afirmando Llamazares que el club está ganando «como marca».
El problema de los campos
Uno de los temas de actualidad que no podía pasar por alto Llamazares era el del estado del césped del Área Deportiva de Puente Castro que ha llevado a los equipos del club, también al primero, a pasar por diferentes campos en una situación que ha generado fricción con otras entidades, concretamente el León Club: «Llevamos dos meses sin campo para entrenar 300 niños por las obras del Área, que se han retrasado por la meteorología. No somos ‘okupas’ somos desahuciados y hay clubes como la Peña o el Ejido que han puesto todo de su parte para hacernos un hueco y ayudarnos. Hay que recordar que las instalaciones son municipales, no de ningún club, tampoco el Área, donde se juega a rugby y hay niños que han estado jugando en los campos de fútbol. De hecho, el Área lo utiliza un responsable del León Club para organizar un torneo que era de la Cultural y con el que se quedaron con una organización sin ánimo de lucro, pero se lucran con él. Esos días no nos dejan usar el Área y no tenemos nada que decir porque no es nuestra, como tampoco el CHF es del León Club, esos campos los utilizan muchos más niños de otros clubes y ha sido el Ayuntamiento el que nos ha mandado allí porque así lo creen sus técnicos, de hecho hemos ofrecido a nuestro personal de jardinería para que pasase por allí después del entrenamiento».Además, quiso recordar Llamazares que la Cultural «es el único club que invierte en instalaciones que no son suyas, que son municipales, en el Reino de León se han invertido 1.250.000 euros y en Puente Castro 150.000 euros, además de darle 6.000 o 7.000 euros a la delegación para repartir entre los más pequeños. Tenemos al Júpiter, que es el segundo equipo de la capital, cambiándose en la calle para entrenar en La Granja, a un juvenil División de Honor entrenando compartiendo campos porque nos hacen ese hueco... está claro que la situación no es la ideal, pero no vamos a dar patadas a la pared y sí adaptarnos, aunque algunos quieran informar solo para poner en el disparadero a la Cultural, el socio debe saber cuál es la situación real».
Obviamente una solución ideal sería la construcción de una ciudad deportiva propia que solventara los problemas propios y descongestionara los campos para el resto de clubes, una situación que aseguró Llamazares «sería ideal, solo falta quién pone el dinero, el Ayuntamiento sabe de las carencias que hay, pero una solución así solo es viable si estamos en Segunda, yo se lo digo a ellos, si entramos ahí LaLiga a través de CVC te va a dar un dinero para invertir en infraestructuras y ya podíamos sentarnos a hablar de un proyecto para ello, pero mientras tanto hay que adaptarse, Aspire ya va a construir un campo que yo, egoístamente, lo quisiera para la Cultural, pero han decidido dejar un legado a León y eso habla muy bien de ellos».
Un mercado tranquilo
Ya en el mes de enero y con la ventana de fichajes abierta, aseguró Llamazares que en la parcela deportiva «estamos ilusionados, hay que tener paciencia con el equipo, dejar trabajar y las cosas irán saliendo, la categoría es espectacular y hay que valorar lo que se está haciendo». En ese sentido aseguró sentir «que la música que suena es la mejor de los últimos años, por el entorno, el vestuario, la dirección deportiva, el cuerpo técnico, hay una sincronía y una tranquilidad que suena bien, pero no sé cómo acabará». Una situación que hace que el director general espere por tanto un mercado invernal «sin apenas movimientos, hemos aprendido de la experiencia y salvo alguna excepción no nos ha ido bien, además nadie ha levantado la mano porque se quiere ir así que solo haremos algo que nos pueda encajar económicamente con alguna ficha sub 23, queremos que Rodri juegue y salga de casa a ganar experiencia como ha hecho Marcos y Antonio (Das Chagas) en principio bajará al Júpiter, así que tendríamos esas dos fichas». Un mercado por tanto para «asentar el proyecto, no queremos fichar otros 15 jugadores en verano, se lleva trabajando en renovaciones meses y alguna continuidad se cerrará o puede estar cerrada, pero hay veces que no se hace público por motivos diferentes».Lejos están fichajes como el de Lucas Pérez que prefirió ver «siendo positivo, porque la liga cada vez mejora más, pero yo creo que hay que empezar a tener límites salariales y un control más exhaustivo, hay que darle tiempo porque es una competición nueva y se van dando pasos».
«Sorprendido» con el baloncesto
Habló también Llamazares de la sección de baloncesto, con la que reconoció estar «sorprendido» por el apoyo de los aficionados, que ha permitido presupuestar «también en cuanto a patrocinios un poco más de lo que pensábamos». Explicó el director general que la sección «debe mantenerse con sus recursos, en esos dos aspectos más las subvenciones que se puedan recibir, se ha creado un microclima favorable para el baloncesto, hay mucha gente que se ha sumado y al final la sección estará donde su gente quiera».Porque explicó Llamazares que la sección «no puede costarle un solo euro a la Cultural ni se pueden desviar fondos del fútbol, no noto ansiedad por llegar arriba, lo ideal es dar un paso más pero hay que ver quién paga esa fiesta de ascender, si todas las partes se implican se podrá hacer, pero el baloncesto es deficitario». Así, dejó claro Llamazares que el ascenso a LEB Plata solo se producirá «si se consigue deportivamente, tuvimos la oportunidad este verano de entrar más arriba y no la quisimos porque hay que ir construyendo y disfrutar del camino».
Una situación similar a la del equipo femenino «que de momento hemos lanzado para ver qué respuesta había, el objetivo es ir creciendo desde la base e iremos paso a paso». Una de las novedades en un centenario que, si nada se tuerce, tendrá como protagonista del partido que se disputará el próximo mes de agosto al Athletic de Bilbao como invitado. Además, anunció la incorporación al club del que fuera lateral del equipo Aitor Fernández, retirado por una grave lesión y que formará parte de la estructura de la academia culturalista.