León club a club: CD La Virgen del Camino, manteniendo las buenas costumbres

Pasan los años y La Virgen del Camino no sólo mantiene sus virtudes, sino también su principal reivindicación y la buena costumbre de continuar creciendo cuando parece que ya ha alcanzado su tope.

Dos equipos más, un alevín y un infantil, suma un conjunto leonés que sigue batiendo récords de licencias una temporada más y que sólo con los equipos de niños tiene ya cerca de 250 con presencia en todas las categorías hasta sumar un total de 20 en su estructura.

Una manera de dar un servicio a los jóvenes del municipio de Valverde de la Virgen que quieren disfrutar del fútbol, puesto que un 90% de sus jugadores de base pertenecen a La Virgen o sus alrededores.

«Queremos que todo el que quiera jugar en el municipio tenga dónde. Si se necesitan más equipos se crean»

¿El objetivo? Como señala uno de los encargados de su cantera, el que fuera jugador de la Cultural Esaú García, es «que los niños sigan disfrutando del fútbol, si luego puedes subir a Liga Nacional con el juvenil o a Primera con el cadete como estamos peleando pues será bienvenido, pero no son los resultados algo que pongamos como obligatorio,  nos importan más los valores que vayan adquiriendo que las clasificaciones».

Por eso, aunque equipos más potentes en base les lleven jugadores, la mentalidad es que «habrá otros que les sustituyan, este año nos desmontaron un equipo muy bueno que teníamos en una categoría en la que acabamos creando uno más por todos los niños que había. Si tenemos que crear más conjuntos lo hacemos, pero queremos que todo el mundo del municipio que quiera jugar tenga dónde hacerlo».

La eterna reivindicación es hacer de hierba artificial los Dominicos, que en invierno se pone casi impracticable

Entre tres escenarios diferentes se reparten los entrenamientos de los diferentes equipos, pues unos están en el campo de las piscinas, otros en los Dominicos y algunas veces algunos se reubican en el campo de la base aérea.

Eso sí, los partidos se centran principalmente en ese único campo existente en los Dominicos, lo que provoca que sobre todo cuando llegue el mal tiempo acabe estando impracticable por el numeroso uso y que sigan pidiendo un año más, de momento sin éxito, que «se haga artificial, que supone mucho dinero pero sería un paso adelante muy importante que mejoraría mucho las condiciones para los equipos».