Y es que se antoja muy difícil que alguien consiga igualar alguna vez el palmarés de la de Camponaraya, especialmente a nivel continental. Desde que se subiera por primera vez a un podio en un Europeo hace ya más de una década –en el campeonato disputado en Estrasburgo en 2007–, Valentín no ha hecho otra cosa que colgarse medallas al cuello.
Así, este sábado, en el Campeonato de Europa de Halterofilia que se celebra en Bucarest, la haltera berciana buscará su cuarto título continental y prolongar un reinado que comenzó en Tel Aviv en 2014.
Desde que se alzara con la triple corona en tierra israelí y se subiera a lo más alto del podio tras haber conseguido tres platas y tres bronces en los campeonatos anteriores, nadie ha sido capaz de doblegar a la berciana en el viejo continente.
Al año siguiente repitió triplete en Tiflis, y tras perderse el campeonato de 2016 –tampoco llegó al Mundial de Houston– para recuperarse plenamente de una lesión que no impidió que tras dos metales en diferido, Valentín pudiera disfrutar de un podio olímpico, el año pasado consiguió su tercer entorchado en Split.
El récord de Estefanía Juan, a tiro
Por ello, Valentín parte como la gran e indiscutible favorito en un Europeo marcado por su proximidad con el Mundial. Apenas tres meses después de que se proclamara campeona del mundo por primera vez en Anaheim (Estados Unidos), vuelve a un gran escenario con la oportunidad también de hacer historia.
Valentín puede lograr uno de los pocos récords que le quedan, ser la española con más europeos de la historiaEn toda la historia de la halterofilia española, solo dos deportistas han conseguido el campeonato de Europa en tres ocasiones: Estefanía Juan y Lydia Valentín. Así, en caso de cumplir los pronósticos y revalidar el título, la de Camponaraya podrá añadir un nuevo hito a su currículum, una posibilidad que tampoco le obsesiona. «Ha habido otra española, Estefanía Juan, que ha conseguido tres títulos europeos, que ha sido algo increíble, y si consigo este seré la española con más títulos, pero como siempre he dicho yo me voy a centrar en la competición. Voy con muchísimas ganas», aseguró Valentín antes de poner rumbo a Bucarest.
Y no le puede la presión. Es consciente de que en la capital rumana todos los focos se centrarán en su figura, una condición que lejos de intimidarle, le ayuda a seguir batiendo todos los récords. «Me motiva que ahora se me exija el oro. Siento que la gente cree en mí y eso para mí es importante. Más que presionarme, lo que hace es motivarme», sentenció.
Figura contra el dopaje
Valentín se ha convertido en un icono del juego limpio. Ganadora de dos medallas olímpicas por la descalificación por el consumo de sustancia prohibidas por parte de sus rivales, la de Camponaraya lleva diez años al más alto nivel viendo como buena parte de sus principales competidoras encadenaban sanciones.
Esto provocó que finalmente la Federación Internacional de Halterofilia (IWF) moviera ficha y suspendió a los países que dieron tres o más positivos en los reanálisis de las muestras de Pekín 2008 y Londres 2012, impidiendo su participación en las competiciones de este año.
Así, países potencias como Bielorrusia, Ucrania o Rusia se han quedado fuera del campeonato. En total fueron sancionados nueve países que ganaron 18 de las 45 entregadas en los pasados Juegos Olímpicos de Río.
Nayo, su principal rival
Respecto a sus rivales en la competición del sábado (12 horas, retransmitida por Eurosport), Lydia Valentín se encontrará con la que fuera medalla de plata en el pasado Mundial en que ella logró el oro, la francesa Gaelle Nayo. La polaca Wiejak, la sueca Akerlund, la israelí Rubanovich y la finlandesa Ilmarinen serán el resto de halteras que conformen la competición.