Bembibre 67 - 65 Campus Promete: 'Paso de gigante hacia la salvación, licencia para soñar a lo grande'

Embutidos Pajariel se agarra a los buenos resultados en su feudo para volver a ganar tras cuatro derrotas consecutivas

Alejandro Cardenal
08/01/2016
 Actualizado a 01/09/2019
Imagen de archivo de un partido del Embutidos Pajariel en el Bembibre Arena. | CÉSAR SÁNCHEZ
Imagen de archivo de un partido del Embutidos Pajariel en el Bembibre Arena. | CÉSAR SÁNCHEZ
Al final hubo final feliz. Embutidos Pajariel Bembibre supo sufrir para deshacerse (67-65) del Campus Promete y volver a la senda del triunfo tras terminar el año con tres derrotas y arrancar 2016 con un nuevo tropiezo en Cadí La Seu.

Más allá de la importancia de la victoria como bálsamo tras los últimos malos resultados, el partido de ayer permite que el conjunto rojillo acaricie la permanencia con doce partidos todavía por delante, ya que deja la zona de descenso, como mínimo, a tres triunfos de distancia, y supone ganarle el ‘basket-average’ a un rival que sí se mete de lleno en la lucha por evitar la Liga 2.

Paso de gigante para la salvación, sí; y licencia para soñar. Y es que el conjunto berciano vuelve a acercarse al ‘playoff’ -sexto a una victoria de Gernika- recuperando el espíritu que le catapultó a la zona noble de la tabla durante las primera jornadas, con la solidez defensiva como bandera.

Quizá el Bembibre Arena no vio la mejor versión de las discípulas de ‘Chiqui’ Barros, pero sí la más madura. Ganó el que mejor supo aguantar los nervios en un partido que no era de vida o muerte, pero se antojaba clave para discernir cuáles serán los objetivos de unos y otros a final de temporada.

En un choque que fue igualado desde el primer al último minuto -la máxima distancia fue de seis puntos-, brilló con luz propia la recién llegada Shanece Mckinney, que firmó un debut de ensueño con veinte puntos y se metió en el bolsillo a su nueva afición. También fue importante la veteranía de Anna Gómez, cuyos tiros libres en un último cuarto de infarto fueron claves para la victoria final.

A los últimos diez minutos se llegó con las rojillas uno arriba (47-46) y aunque fueron las riojanas las que comenzaron mejor, llegándose a poner por delante en el electrónico (47-50), la inspiración de la base burgalesa y el acierto de Jovana Vukoje, que completó su mejor partido como jugadora bembibrense, terminaron inclinando la balanza para las de ‘Chiqui’ Barros.
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