Más de 2.000 días llevan esperando en Villamartín de Don Sancho a que la Diputación de León comience las obras de la carretera que les conecta con la capital provincial. La vía que une este municipio con Quintana del Monte, localidad del Ayuntamiento de Valdepolo, está repleta de baches, socavones y gravilla suelta en un firme que lleva más de medio siglo sin asfaltarse. Los trámites para poner solución con la institución que actualmente preside Gerardo Álvarez Courel comenzaron en el año 2018 y, pese a la sucesión de equipos de gobierno y de promesas, los trabajos continúan sin arrancar.
Según explican desde el Ayuntamiento de Villamartín de Don Sancho a este periódico, «la obra lleva adjudicada desde hace un año y medio». No obstante, las máquinas siguen sin llegar. «Lo último que nos dijeron es que supuestamente iban a comenzar a primeros de mayo. Si hubiera un poco de dignidad, varios personas tenían que haber dimitido. No es normal que, con el dinero de todos, se pierdan proyectos por tanta incompetencia política, que se esté jugando de esta manera con proyectos que cuestan mucho dinero y que puedan finalmente no hacerse», denuncia Pelayo Gómez como concejal.
Ante unos plazos para el comienzo de las obras que se retrasan constantemente, los vecinos de este pueblo leonés, y de otros cercanos que también hacen uso de esta carretera para desplazarse a la ciudad de León, temen que la subida de costes provoque que la empresa adjudicataria se desentienda del proyecto. Por ello, en sus reiteradas quejas, desde Villamartín de Don Sancho recuerdan que «no se pide una autopista, solo una carretera digna».
Según explica Pelayo Gómez, la corporación municipal ha solicitado por sede electrónica reuniones con responsables del servicio de Fomento y con el propio Álvarez Courel que no han obtenido respuesta. «Solo pedimos al presidente de la Diputación que venga y lo explique. O al diputado responsable de las carreteras. Que vengan y que den las explicaciones que a nosotros nos están pidiendo a nivel Ayuntamiento. Es una solicitud que lleva siete años en curso y todavía no se han comenzado las obras», expone el edil.
"No es normal que, con el dinero de todos, se pierdan proyectos por tanta incompetencia política"
Los vecinos consideran que en el medio rural no tienen capacidad para «hacer una manifestación grande y cortar la carretera». En localidades cercanas como Castroañe, Villaselán, Santa María del Río, Villamizar, Villacintor, Valdavida o Mozos de Cea también son usuarios de esta vía y se ven obligados a dar largos rodeos para evitar los peligros del firme, hartos ya de las «excusas» de la Diputación.
De esta manera, después de tantas y tantas reivindicaciones, en Villamartín de Don Sancho consideran que el equipo de gobierno de la Diputación se está «riendo» de sus demandas. Las obras siguen sin comenzar y la espera continúa para los usuarios de una vía que lleva más de 50 años sin asfaltarse.