Valderas, el regadío que nunca llega a buen puerto

Los agricultores de la zona han perdido la cuenta de las veces que les han prometido un proyecto que, de momento, tampoco contempla el borrador del nuevo Plan Hidrológico

T. Giganto
29/11/2021
 Actualizado a 29/11/2021
Panorámica general de los terrenos que esperan la llegada del regadío para abandonar los sistemas en precario. | MAURICIO PEÑA
Panorámica general de los terrenos que esperan la llegada del regadío para abandonar los sistemas en precario. | MAURICIO PEÑA
Se podría llenar un periódico entero solo con las noticias que se llevan publicando en las últimas décadas con la promesa de hacer regables un millar de hectáreas en Valderas, un proyecto que todos los partidos políticos han planeado sin que ninguno lo haya llevado a término, un arma arrojadiza del ‘yo más’ que tanto se pregona en campañas electorales tras las que queda eso, lo prometido, las buenas palabras. Y mientras tanto, los agricultores esperan y lo hacen sin desesperarse pero siendo conscientes en todo momento de que "si lo hacen, sería una gran oportunidad para que algún joven pueda engancharse al pueblo, a trabajar la tierra en su tierra". Sus ganas no bastan y tampoco las promesas que son eso, promesas. El borrador del nuevo Plan Hidrológico que pauta las actuaciones en materia de aprovechamiento de agua en la cuenca del Duero entre los años 2022 y 2027 consta de unas 11.000 páginas y en ninguna se habla de Valderas.

Jesús Julio Carnero ha pedido a la CHD incorporar estas mil hectáreas al regadío en el nuevo Plan"No se ha hecho absolutamente nada", se apremia a expresar Jesús Rodríguez, presidente de la Cámara Agropecuaria de Valderas, quien por el momento asegura no tener constancia de que vayan a estar más cerca de hacer regables un millar de hectáreas en su municipio. "Ni siquiera han sido todavía declaradas de interés general, un trámite que supondría el primer paso para poder regar en la zona", asegura. Este primer trámite le correspondería hacerlo al Gobierno, y por el momento no se ha ejecutado. El segundo sería ya cosa de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), que tendría que contemplar el regadío en estas mil hectáreas, con lo que estas obras de transformación podrían optar con ello a ayudas procedentes, por ejemplo, de fondos europeos.

Pero nada de nada. La última noticia en la que figuró este millar de hectáreas valderenses fue la publicada tras el encuentro del consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, con la presidenta de la CHD, Cristina Danés. Este le introdujo varias alegaciones que harán desde la Junta al borrador del Plan Hidrológico y entre ellas figuran el incorporar 7.000 hectáreas más de regadío en el documento (1.000 son las prometidas de Valderas). En el borrador inicial, la CHD incorpora un total de 49.000 hectáreas de secano que se transformarán. A este respecto, la presidenta de la Confederación avanzó que estudiará la petición, que estará en todo caso condicionada a no poner en riesgo inversiones en marcha por parte de otros regantes, que "puedan contar con esa garantía de suministro de agua".

Esta justificación de no querer ampliar el terreno regable no es una excusa para los agricultores de Valderas que ven cómo si se transformarán otras zonas mucho más amplias que la suya o contemplan cómo la CHD se encamina a regular la cuenca del río Carrión para garantizar el riego de casi 60.000 hectáreas en el sur de Palencia y en Valladolid, zonas donde actualmente aprovechan el agua de las aportaciones de los ríos Esla y del Cea, que llegan a través de los canales de los Payuelos y del Canal Cea-Carrión.

Por el momento no han sido declaradas ni de interés general tras años de reivindicaciones en la zonaA la espera de saber si la CHD incluye finalmente, y tras las alegaciones al nuevo Plan Hidrológico, el regadío de mil hectáreas en la zona de Valderas, en este municipio recuerdan como desde hace ya casi 40 años han ido sucediéndose las visitas instituciones y electorales que han tenido prometiendo y no cumpliendo. "Unos por otros... Aquí seguimos sin tener regadío". Hasta ahora hay agricultores que han aprovechado, en precario, las aguas del Cea para regar sus fincas a través de concesiones que han ido agotándose con el tiempo.

Habría que remontarse a un primer proyecto en el que contemplaban la ejecución de una balsa, para la que incluso se llegaron a expropiar los terrenos. Era La Semillana. Allí proyectaban almacenar el agua sobrante de la margen izquierda del Canal del Porma y la de las lluvias. Pero nada. Años más tarde, a comienzos del siglo XXI, la promesa llegaba a Valderas con muchas intenciones, muy buenas palabras y pocos hechos. La Comunidad de Regantes de la Margen Izquierda del Porma aceptó integrar en ella el regadío de Valderas, donde conformarían el Sector XII. Con ello podrían regar con el agua embalsada de Riaño y dar rienda suelta al proyecto. Pero han pasado casi 20 años desde aquellas reuniones y nada se ha materializado. Siguen esperando los agricultores de Valderas a que, en algún momento, las promesas se cumplan. No pierden la esperanza pero sí jóvenes que desisten de tirar de un campo de secano un tanto incierto. "Existe voluntad", han dicho una y mil veces los políticos sobre la transformación del regadío de Valderas. Pero nunca llega. Nunca, de momento. Y si la CHD no cambia de opinión, no llegará, como poco, de aquí a 2027. Cuestión de fe, querencia a la tierra, ganas. En Valderas, siguen esperando.
Archivado en
Lo más leído