Los estudiantes de la Universidad de León (ULE) estrenarán su nuevo hogar en 2026. Una casa blanca por fuera y 'verde' por dentro de la que este martes se han presentado los avances de sus obras insistiendo, precisamente, en su carácter sostenible.
Nuria González, rectora de la ULE, ha explicado en la visita a las obras de la Casa del Estudiante que se "ha aprovechado la fachada sur para hacer un edificio lo más sostenible posible", con paneles solares y con un sistema de climatización también respetuoso con el medio ambiente. "Va a ser un espacio donde van a poder intercambiar conocimientos, reunirse…", ha manifestado la máxima representante de la institución académica.
En este sentido, desde el Rectorado se apunta a que la inversión responde a la necesidad de que los universitarios dispongan de un espacio de convivencia común a todas las facultades. En las tres plantas de este edificio de 7.500 metros cuadrados tendrán cabida aulas de lectura y de estudio, zonas para asociaciones o despachos destinados a servicios administrativos, todavía sin concretar. De la misma manera, se valora la posibilidad de que en "una obra posterior" pueda añadirse un teatro, a modo de "anexo" a la Casa del Estudiante.
La rectora ha estado acompañada en la visita por Ramón Ángel Fernández, vicerrector de Infraestructuras, Sostenibilidad y Transformación Digital, por Fernando González, como responsable de Geoxa, y de Melquíades Ranilla, arquitecto del proyecto. Todos ellos han exlicado que las obras, que comenzaron en febrero del pasado año, tienen un plazo de ejecución de 20 meses y que la inversión final superará los 16 millones de euros. "Es un diseño con el que prima mucho el acero, el hormigón y los muros cortina que en este momento todavía no están ejecutados", ha apuntado Fernando González.
Materiales reciclados y sistemas inteligentes
En todo caso, lo que más se ha querido destacar en el acto de este martes es el alma 'verde' de la Casa del Estudiante, que tendrá bajos consumos energéticos y emisiones de CO2 reducidas en una "máxima calificación del certificado energético". En este sentido, el edificio está siendo construido con "materiales reciclados" y cuenta con sistemas inteligentes de iluminación y ventilación. "Está diseñado con parámetros totalmente sostenibles, que tienen en cuenta su ubicación, climatología y también la orientación. De tal manera, que tendrá un consumo de energía muy bajo y un impacto medioambiental también muy bajo", ha expresado el arquitecto responsable del proyecto.
En la presentación de este martes también se ha destacado la futura escalera "monumental", ya visible en las obras. De cuatro metros de ancho, cuenta con graderíos laterales.
Detalles para los que en el Campus de Vegazana se han inspirado en edificios similares del mundo anglosajón. De esta manera, los responsables del proyecto han analizado diferentes propuestas internacionales para importar el modelo a León. En especial, "los edificios de los estudiantes, las uniones de los estudiantes" de Stuttgart, Cardiff y Columbia.
Se espera que las obras, que parecen avanzar a buen ritmo, queden finalizadas antes de que termine 2025. Después, a lo largo del próximo año, los estudiantes comenzarán a hacer sus quedadas, reuniones y planes entre sus muros cortina, en un vistoso espacio que promete convertirse en uno de los más emblemáticos de la ULE.