Rajoy se ve obligado a recular y restablecer el plus de movilidad a los trabajadores de Limpieza

La Concejalía de Hacienda y Personal del Ayuntamiento de León que dirige Agustín Rajoy se ha visto obligada a dar marcha atrás a la decisión adoptada hace sólo unas semanas de anular el pago de movilidad funcional a los trabajadores del servicio de Limpieza Viaria. Como ya habían advertido los técnicos, esta decisión ponía en riesgo la recogida de residuos en diversos distritos de la ciudad, y añadía un nuevo problema a un servicio que se considera víctima de una mala gestión, sobre todo por la falta de personal que, desde la concejalía del área, fundamentan en las limitaciones impuestas por el plan de ajuste negándose a crear nuevas plazas a pesar de verse amenazada la sostenibilidad de este servicio.

Se trata de un complemento que reciben los trabajadores por desarrollar tareas que no corresponden a su categoría Los datos del pasado ejercicio reflejan que una de cada cinco quejas de los leoneses ante el Ayuntamiento se refieren a la limpieza, algo que los trabajadores atribuyen a la gestión del servicio. Existe ya cierto malestar en la plantilla por los incumplimientos del acuerdo de subrogación alcanzado con la municipalización del servicio en 2013, que se convirtió en un referente nacional y logró un ahorro cercano a diez millones de euros al año.

Este descontento, que ya se ha materializado a través de quejas formales ante la Concejalía de Hacienda y Personal que dirige Agustín Rajoy, se acrecentaba después de que se optara por suprimir la movilidad de los trabajadores en la nómina del mes pasado. Se trata de un complemento que reciben muchos integrantes de la plantilla por desarrollar tareas que no corresponden a su categoría oficial.

Los trabajadores ya defendieron que era fundamental esta movilidad a la hora de sacar adelante un servicio que para este año cuenta con una plantilla de 201 efectivos, según los presupuestos recientemente aprobados. Como también lo advirtieron los técnicos. Finalmente, Rajoy ha tenido que recular y restablecer este complemento.

Cabe recordar que en el momento en el que se acordó la subrogación de la plantilla y la liquidación del contrato con Urbaser se estableció una plantilla mínima de 224 trabajadores (más sustituciones de bajas y vacaciones). Este compromiso no se cumplió ya en 2015, con un total de 203 efectivos para la limpieza. La plantilla pactada con la municipalización ya suponía una rebaja en relación a la media de los últimos años de contrato con Urbaser, en los que la media se situaba en 255 efectivos. Los datos que manejan los trabajadores establecen que el ahorro en personal durante el año 2015 fue de 350.000 euros.

También la falta de inversiones en la mejora de medios contribuye al descontento de los trabajadores, que lamentan que se esté «dejando caer» el servicio. Aseguran que las inversiones entre 2013 y 2015 han ascendido a 600.000 euros. Es preciso recordar finalmente que el acuerdo de subrogación incluía un millón de euros en cada ejercicio.