La pedanía astorgana de Murias de Rechivaldo cuenta desde hace unos días ya con la escultura de un obispo para recibir a los peregrinos que realizan el Camino de Santiago a su paso por la localidad.
Un obispo caracterizado como peregrino, que representa a la Diócesis de Astorga, que está «bendiciendo o despidiendo al peregrino» y que le invita «a volver».
Una escultura que se enmarca dentro del ‘Proyecto de Embellecimiento’ que realizan el Ayuntamiento astorgano en la ciudad con varias obras realizadas por el artista leonés Amancio González.