Puebla de Lillo licita la gestión del centro de turismo rural de La Mina

El Ayuntamiento ofrece un contrato de tres años y la posibilidad de otros dos mediante sendas prórrogas

Alfonso Martínez
14/12/2022
 Actualizado a 14/12/2022
La Mina es un complejo formado por tres edificios independientes. | L.N.C.
La Mina es un complejo formado por tres edificios independientes. | L.N.C.
El Ayuntamiento de Puebla de Lillo saca de nuevo a licitación la gestión y explotación del centro de turismo rural La Mina, ubicado junto a la carretera que sube hacia la estación de esquí de San Isidro.

La primera convocatoria, impulsada el pasado mes de noviembre, quedó finalmente desierta y ahora se ha abierto un nuevo plazo de presentación de ofertas que se extenderá hasta el próximo 4 de enero.

Cabe destacar que el contrato comprende la explotación de las instalaciones –son tres edificios, dos centrados en el alojamiento y uno con bar y restaurante– durante un periodo de tres años, aunque se contempla la posibilidad de dos prórrogas de una anualidad cada una. Dichas prórrogas llegarían previa solicitud por parte del adjudicatario al Ayuntamiento de Puebla de Lillo con una antelación de dos meses antes de la finalización de la concesión y posterior aprobación en sesión plenaria.

El canon anual que el adjudicatario debe abonar a las arcas municipales es inicialmente de 6.000 euros al año (IVA incluido), aunque los licitadores pueden elevar esta cantidad en las ofertas que presenten.

Los detalles del concurso, que pueden consultarse ya en la Plataforma de Contratación del Sector Público, establece que el primer año el canon se ingresará en septiembre. El resto de los años se ingresará el 50% antes del 30 de abril y el resto antes del 30 de septiembre de cada año.

La revisión del IPC se realizará con carácter anual a contar desde la fecha de la firma del contrato. El último ingreso se realizará, en todo caso, tres meses antes de que finalice la concesión.

El adjudicatario podrá solicitar la reinversión del canon ingresado en obras que considere necesarias para la mejora de los edificios. Al mismo tiempo, deberá disponer de personal suficiente y cualificado para atender las instalaciones del centro de turismo rural, que será como mínimo de un responsable, un cocinero y un camarero.
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