El Partido Popular volvería a ganar las elecciones autonómicas de Castilla y León si se celebraran en este momento al conseguir el 36,7 por ciento de los votos y entre 35 y 38 procuradores, lo que le permitiría gobernar la Junta en solitario, pero con pactos puntuales, o reeditar una coalición. Los socialistas serían la segunda fuerza, con el 30,1 por ciento de los votos y entre 27 y 30 parlamentarios, mientras Vox se quedaría con ocho y como tercer partido de las Cortes.
Así lo refleja una encuesta de Sigma Dos para Castilla y León Televisión (CyLTV), con un total de 2.700 entrevistas telefónicas y online realizadas entre el 27 de mayo y el 7 de junio, con un nivel de confianza del 95,5 por ciento y un error de muestreo del +-2. Además, refleja un hemiciclo con hasta cuatro partidos más pues Podemos obtendría entre tres y cinco procuradores; UPL, otros tres; Soria YA uno o dos y Por Ávila mantendría el parlamentario o podría desaparecer del Parlamento autonómico.
Asimismo, el PP de Alfonso Fernández Mañueco reforzaría su apoyo electoral, con una subida de cinco puntos porcentuales respecto a las últimas elecciones autonómicas, celebradas en febrero de 2022. Esto permitiría a los ‘populares’ ampliar su representación en las Cortes, con entre cuatro y siete procuradores más que ahora, hasta los 35 o 38, aunque no lograría los 41 de la mayoría absoluta. Por tanto, la gobernabilidad pasaría por un ejecutivo en solitario que se apoye en pactos con la UPL o la suma de Soria Ya y Por Ávila o con Vox, con quien ya formó una coalición al inicio de esta legislatura.

Su principal competidor, el PSOE de Carlos Martínez, mejoraría ligeramente su respaldo en las urnas, con un 30,1 por ciento de los votos, una décima más, aunque sólo sería el partido más votado en León. Sin embargo, podría perder un procurador en el peor escenario o sumar dos más en el mejor, ya que la encuesta le otorga entre 27 y 30 parlamentarios. No obstante, no podría armar una mayoría para gobernar la Junta porque PP y Vox con sus votos lo impedirían, ya que entre los dos suman entre 43 y 46 escaños.
Vox, tercera fuerza, vería mermado su respaldo en unas elecciones autonómicas, pues retrocedería desde el 17,6 por ciento de los votos al 13,2 por ciento y desde los 13 procuradores que consiguió en 2022, si bien ahora tiene once al haber expulsado a dos parlamentarios, a los ocho. De nuevo, podría convertirse en socio del PP en el gobierno de la Comunidad, si bien los ‘populares’ tendrían otras alternativas con los partidos localistas para poder gobernar.
Por el contrario Podemos, ahora coaligado con IU y Equo-Los Verdes, emergería con fuerza en las Cortes, mejorando sus resultados respecto a los anteriores comicios, pues pasaría del 5,1 por ciento al 7,9 por ciento de los votos. Esto significaría que su procurador actual se convertiría en tres o cinco. También mejora UPL, que de media en la Comunidad conseguiría el 4,9 por ciento de los votos, seis décimas más que en 2022, pero mantendría sus tres parlamentarios.
Peor resultado obtendría Soria YA, que pasaría del 1,9 por ciento al 0,9 por ciento, y de tres procuradores a uno o dos, mientras Por Ávila podría desaparecer de las Cortes o conservar su representación, si bien sus apoyos se recortarían a la mitad, desde el 1,1 por ciento al 0,5 por ciento. Además, Ciudadanos, que entró en la cámara autonómica en 2015, desaparecería al no revalidar su actual procurador. El resto de partidos, incluidos Se acabó la fiesta de Alvise Pérez, Vía Burgalesa o Zamora Decide se mantendrían como formaciones extraparlamentarias.
En León, sin demasiados cambios
En León, la encuesta no deja grandes cambios en el reparto de procuradores, pues PSOE y PP se quedarían con cuatro cada uno y la UPL con tres. En cambio, Vox pasaría a tener uno sólo, lo que permitiría que Podemos tuviera representación. Los socialistas conservarían el primer puesto en un empate técnico con el PP con el 27,7 y 27,2 por ciento de los votos, ya que los primeros pierden más de un punto y los segundos mejoran más de dos. UPL ampliaría su respaldo hasta el 23,4 por ciento, los de Santiago Abascal se dejarían más de tres puntos (11,9 por ciento), mientras los ‘morados’ sumarían el 8,2 por ciento (3,2 puntos).