La localidad de Puebla de Lillo inauguró este sábado una nueva edición de la Exposición Nacional de la raza Parda de Montaña con presencia de cerca de un centenar de reses procedentes de doce ganaderías de distintos puntos de la provincia de León (Villahibiera, Los Barrios de Luna, Omaña, La Majúa y por supuesto las dos y únicas ganaderías de esta raza en la comarca, las dos del municipio de Reyero.
La de Eduardo Díez, de Pallide, que cuenta en su cabaña con unas 300 reses, y la de Armando Alonso, de Viego, que acumula más de 90 madres, algo que sin duda llama poderosamente la atención tanto al público como al resto de ganaderos, que están viendo cómo una raza que fue considerada como autóctona de toda la montaña –y que estuvo a punto de desaparecer– se está recuperando gracias al trabajo y el esfuerzo de Eduardo y de Armando.
Esta raza de ganado vacuno formó parte durante décadas de la vida de cientos de familias en toda la montaña, pues quien tenía una pareja de éstas vacas era como tener un tractor, ya que con ellas se araba, se recogía la hierba o se acarreaba la leña, además de dar leche gratis y al menos una cría al año que se vendía para cubrir otras necesidades de la casa.
Según Ruth Álvarez, secretaria de la Federación Española de Raza Parda de Montaña, «cada vez hay más ganaderías incorporándose a la cría». «Hace unos meses, esta raza había sido declarada raza amenazada y a día de hoy se está viendo que hay muchos ganaderos interesados en mantenerla, algo que seguro que se verá refrendado el próximo año, ya que hay estimaciones de que nos llegará más ayuda de la PAC. Además, quiero adelantar que la exposición a nivel nacional de 2024 se celebrará también en Puebla de Lillo», agregó.
Eduardo Díez asegura que en la exposición se puede ver una muestra de una raza «que ahora está un poco perdida» y que antes era casi la única que había. «Esta muestra nos viene bien, porque atrae a mucha gente, y las ve. Además, aunque estos días no se haga venta, presumiblemente se hará más adelante», detalla el ganadero de Pallide.
Por su parte, Armando Alonso subraya que «tendría que haber muchas ferias de estas a lo largo del año, ya que esta raza esta un poco olvidada y nosotros queremos que recupere el status que ocupo hasta mediados del siglo XX, cuando estaba presente en todas las cabañas de la montaña».
Por otra parte, este domingo se celebra una charla sobre ‘¿Cómo podemos avanzar la mejora de la genética de la Raza Parda de Montaña?’ a cargo de Clara Díaz y Cristina Meneses, que son genetistas del CSIC-INIA de Madrid.