Día histórico para la Universidad de León este 5 de abril, que ha investido por primera vez a una mujer como doctora Honoris Causa. Sevillana, pero con raíces leonesas en Santa María del Páramo, Laura Lechuga ha rubricado su nombre en la memoria colectiva de la ciudad al alcanzar el máximo reconocimiento de la institución académica leonesa.
"Estoy muy emocionada y espero ser, una vez que se ha roto esta barrera, la primera de muchas que tienen que venir detrás", señaló a los medios antes de la ceremonia, "porque hay muchas mujeres científicas, algunas de León, que son excelentes profesionales". Su disciplina es la Ciencia y Tecnología de los Alimentos y, después de 56 hombres, su "brillante currículum" y su extensa labor divulgativa e investigadora recogida en 270 artículos, la han llevado a conseguir el ansiado birrete laureado.
"Espero ser la primera mujer de muchas que tienen que venir detrás"
"Es la primera mujer pero no por ser mujer, sino por sus méritos", ha señalado en uno de sus últimos actos como rector, Juan Francisco García Marín, que ha valorado el esfuerzo de la doctora Lechuga por toda una vida "dedicada a la ciencia las 24 horas del día" y ha destacado el cambio iniciado hacia la igualdad en el ámbito universitario. "Me alegra la generación que es, similar a la mía, que lo tuvieron más difícil que nosotros, pero afortunadamente los tiempos han cambiado, especialmente en la ciencia y las universidades", ha añadido.
El Aula Magna San Isidoro del edificio que acoge la sede del rectorado, El Albéitar, ha sido testigo este viernes no sólo de la investidura como doctora Honoris Causa de Laura Lechuga, sino también de dos hombres de la rama de Derecho, el asturiano Manuel Atienza y el leonés Dionisio Llamazares, que completan así un cuadro de honor de la ULE en el que ya figuran 57 personajes ilustres.
"Algunas profesiones jurídicas van a desaparecer y serán sustituidas por máquinas"
Atienza y Llamazares, agradecidos a la ULE por este título, han avanzado antes de la ceremonia las ideas que centrarían el discurso más importante de su vida académica. "El derecho ha cambiado mucho y va a cambiar más en muy poco tiempo, como consecuencia de la inteligencia artificial, que va a provocar una alteración completa de las profesiones jurídicas", ha explicado el ovetense Manuel Atienza, cuya especialidad es la Filosofía del Derecho. "Muchas de las profesiones van a desaparecer, pues van a ser susitutidas por máquinas", ha asegurado.
Por su parte, Dionisio Llamazares, natural de Yugueros, ha mostrado su ilusión por convertirse en "profeta" en su tierra y ha reflexionado sobre "la libertad de conciencia, de la tolerancia y de la neutralidad”, como ejes de su discurso de investidura, que citó como ejemplos de valores que "hoy son una utopía, pero pueden ser una realidad del mañana".
"Las utopías de hoy pueden ser la realidad del mañana"
La ceremonia de los tres nuevos Honoris Causa ha estado envuelta por ese aire de alto protocolo que encarnan los actos solemnes de la Universidad, donde las togas, mucetas y puñetas revestían de color un Aula Magna en la que han estado presentes autoridades encabezadas por el alcalde de León, José Antonio Diez, el presidente de la Diputación, Gerardo Álvarez Courel, y el presidente de las Cortes, Carlos Pollán. También representantes del Gobierno, de la Junta, militares, sindicales y, por supuesto, amigos, familiares, estudiantes y miembros de la familia universitaria.
El solemne y emotivo acto ha contado con todos los protocolos habituales, como la imposición del birrete laureado -rojo para Atienza y Llamazares, azul para Lechuga- y la entrega del Libro de la Ciencia, el anillo y los guantes blancos como símbolo de sabiduría. Las promesas de honor ante el rector, los discursos de los protagonistas y de sus 'padrinos' y el 'Gaudeamus Igitur', interpretado por la Juventudes Musicales de la ULE, han cerrado el acto de honor de los académicos de la Universidad de León.