Se cumple un año de la elección de Nuria González como rectora de la Universidad de León (ULE). La primera mujer al mando de la institución académica leonesa cosechó una amplia victoria que avala su hoja de ruta a seis años vista para los campus de Vegazana y Ponferrada. En esta entrevista repasa el trabajo realizado por su equipo en estos primeros 365 días, marcados por la concesión del Grado en Medicina, y los proyectos que tiene previstos para el lustro que tiene por delante en el cargo.
– ¿Qué balance hace de su primer año al frente de la ULE?
– El balance es muy positivo. Es cierto que yo ya conocía la gestión de la Universidad al ser vicerrectora, las necesidades y los proyectos en marcha. Es verdad que ha sido un año intenso. Además, casi nada más tomar posesión, llega el Grado en Medicina. Aunque era una de las cuestiones que llevábamos en el programa, no pensábamos que ese sueño, que esa reivindicación iba a llegar tan pronto. No por ello no merecida, claro. Esto nos ha hecho dedicarle mucho tiempo y esfuerzos a ese grado, que es exigente y ha trastocado este primer año. Es muy positivo y cada día estoy más satisfecha del equipo que tengo. Siguen muy ilusionados y con muchos proyectos cada uno. El balance es muy positivo. Ha habido mucha representación institucional, ya que ser la primera rectora hace que muchas instituciones requieran tu presencia. He conseguido estar muy relacionada a nivel nacional con los rectores, puesto que formo parte de la junta rectora de Crue y eso también tiene exigencias, viajes… Ha sido un año intenso, pero con un balance muy positivo.
– ¿El actual modelo de mandato de seis años aporta mayores facilidades para acometer reformas de calado en la ULE?
– Claro. Siempre lo he dicho. Un mandato de seis años permite hacer proyectos a más largo plazo y sin pensar en una reelección que siempre condiciona los proyectos, combinando un poco lo que debería ser con lo que a veces quiere la comunidad universitaria. Un mandato de seis años da tranquilidad para hacer los proyectos que el equipo de gobierno y la comunidad universitaria, porque todo se aprueba en Consejo de Gobierno y mucho en Consejo Social.
– ¿Qué proyectos se han iniciado dentro de esa hoja de ruta y cuáles pretende emprender a corto y medio plazo?
– En el plano académico, ese Grado en Medicina nos está llevando parte de nuestros esfuerzos. Estamos haciendo una apuesta importante por las microcredenciales, que nos permiten acercar la Universidad a la empresa, con formaciones de corta duración, pero muy adaptadas a las necesidades de los diferentes mercados y sectores. En el tema de infraestructuras, seguimos con la construcción de la Casa del Estudiante. Va a buen ritmo y dentro de los plazos previstos. También haciendo pequeñas actuaciones, según el presupuesto nos permite, en diferentes edificios. También hemos sido sede del Tour de Princesa de Girona y del Trofeo Rector en el Campus de Ponferrada, en otro de los proyectos impulsados desde este nuevo equipo, ya que nunca se había celebrado un Trofeo Rector en un campus periférico. Con algunas modificaciones en el modelo de trofeo, puesto que antes se hacía en un único fin de semana y, al hacerlo en Ponferrada, lo hemos hecho en dos. Eso requiere más esfuerzos, pero hemos apostado por ello y por revitalizar la vida en Ponferrada. También hemos intentado impulsar en mayor medida la vida universitaria, las actividades deportivas, culturales y la vida universitaria en sí, con algunas actuaciones para estudiantes y para engancharlos. Hemos puesto una dirección de Área de Universidad Saludable pensando en el bienestar de la comunidad universitaria, en el físico y en el psicológico. Nos preocupa ayudar a aquellos que, a lo mejor, no están pasando un buen momento, así como el fomento de los hábitos de vida saludable. Hemos impulsado una plataforma más accesible y más fácil para acceder a los cursos de verano, tanto para la comunidad universitaria como para instituciones que a veces también los impulsan. También somos una de las universidades más transparentes de España a la luz de los últimos datos que hemos conocido. A nivel de profesorado, seguimos impulsando la estabilización de nuestro profesorado. Hemos hecho la oferta de empleo público de este año. Los miembros de la comunidad universitaria, a medida que van promocionando en acreditaciones, van consiguiendo mayor estabilidad. Estamos con el programa María Goyri que permite adaptarnos a la Losu, la nueva ley que requiere mayor dotación de profesorado. Viene impulsado por el Ministerio y estamos captando ese talento. También hemos puesto en marcha el nuevo Animalario, que está teniendo un éxito muy grande. Hemos, por primera vez, sacado una convocatoria de contratos postdoctorales de investigadores que ya han leído la tesis y les faltaba un contrato. Pues hemos sacado cinco plazas de contratados postdoctorales. Estamos con los estatutos, porque la Losu lo dice y tenemos que tenerlos listos antes de un año, para el 12 de abril de 2026. Nos hemos puesto en marcha con los estatutos de una forma muy consensuada con toda la comunidad universitaria.
– En este primer año, buena parte de la actualidad universitaria se ha centrado en la implantación de Medicina. ¿Cuáles son las últimas novedades?
– El día de San Isidoro nos convocaron a la quinta reunión del Grado en Medicina y lo que se hizo fue un resumen de lo que estábamos haciendo en estos últimos meses. El plan de estudios está ya consensuado y preparado. Con el profesorado seguimos haciendo cursos de formación para conseguir que esos médicos sean doctores, primero, y luego se acrediten a las distintas figuras de profesor que nos permitan vincularlos al futuro Grado en Medicina. En el tema de infraestructuras, después de la visita de los técnicos y del arquitecto de la Junta, descartaron San Antonio Abad por problemas de accesibilidad y la reforma importante que había que hacer. Aunque los tres primeros cursos tienen que ser en Ciencias de la Salud, donde estamos ya con la licitación del laboratorio de anatomía porque lo necesitamos desde primero, se procederá a la construcción de un edificio en el campus, en la parcela que hay detrás de la biblioteca.
– ¿Cuántos médicos se han acreditado como docentes universitarios? ¿La mayoría de ellos ejercerán como profesores asociados?
– Contamos con seis acreditados que ya estaban antes de empezar con este proceso. Después, hay unos 25 que lo han pedido a la agencia regional antes de que acabara el plazo el 28 de febrero. Estamos a la espera de que, ahora en junio, nos den las respuestas. Hay más que lo pedirán en la agencia regional o a la Aneca. Una vez que los médicos, los profesionales, conocen los requisitos para las diferentes acreditaciones y que desde la Universidad hemos puesto una dirección de evaluación del profesorado dedicada en estos primeros meses al nuevo grado, yo creo que va a ser un goteo continuo de profesionales pidiendo la acreditación para dar clase en Medicina.
– ¿Qué cree que puede aportar León a los futuros estudiantes de Medicina? ¿Cómo puede la Universidad diferenciarse para atraer alumnado?
– Lo que aporta León es una experiencia enorme en titulaciones de Ciencias de la Salud. Ya sabemos que Veterinaria es el grado que lleva más de 170 años en esta Universidad. No digo que sean los veterinarios los que van a dar clases, pero hay profesionales de Bioquímica, Genética, Microbiología… que tienen una experiencia y son profesionales contrastadísimos y aportan la experiencia en esa investigación y esa docencia. Luego, León es una ciudad muy agradable para vivir, con unos costes de vida no muy altos. Ofrece un buen ambiente y la ULE es una universidad relativamente joven, muy dinámica, con mucha actividad y mucha vida universitaria. Por tanto, creo que eso es lo que ofrecemos.
"Va a ser un goteo constante de profesionales pidiendo la acreditación para dar clase en Medicina"
– Más allá de Medicina, en los últimos cursos también se han estrenado titulaciones. ¿Tienen en mente algún otro grado o, con la llegada de Medicina, se puede dar el mapa de titulaciones por cerrado?
– Tenemos algunos grados que estamos valorando y que no es cuestión ahora de decir. Es cierto que en los últimos cuatro años hemos puesto tres grados: Ingeniería de Datos, Nutrición Humana y Dietética, en Ponferrada, y el Grado en Ciencias Gastronómicas. Ahora, en 2025, no habrá nuevo grado, pero lo habrá en 2026. En los últimos cinco años, poner cuatro grados demuestra que la Universidad es muy dinámica. Tener un grado no es sencillo y el último, que es interuniversitario, es también muy exigente. Con la exigencia de un Grado en Medicina, estamos centrados en eso; pero no dudo de que en los seis años de mandato haya más grados. Debe haberlos.
– ¿Qué planes tiene para el Campus de Ponferrada? ¿Pasa su futuro por la especialización en la rama sanitaria como hasta ahora o se abrirá a nuevos grados?
– Por Ciencias de la Salud y por la Ingeniería. Estamos poniendo un grado nuevo porque el Grado en Geomática ahora lo es en Geotecnología y Topografía, dándole un impulso importante porque es una profesión muy demandada y quizá no estábamos recogiendo bien las demandas del mercado laboral. Por eso, hemos hecho una reformulación del plan de estudios. El Campus de Ponferrada tiene los recursos, los profesores y las infraestructuras para ser un campus especializado en Ingeniería y en Ciencias de la Salud.
– ¿Teme el mundo universitario la competencia de la Formación Profesional (FP)? ¿Considera que, en líneas generales, las promociones de graduados son demasiado amplias respecto a la oferta real en el mercado laboral?
– Depende de las titulaciones, pero ahora nos estamos encontrando que la mayoría de las titulaciones tienen más oferta en el mercado de trabajo que demandantes. Si pensamos en todas las Ingenierías, todas las de Ciencias de la Salud, la Educación, las titulaciones de Ciencias Económicas… el grado de inserción es muy alto. Es cierto que debe haber especialidades y a todos los niveles. La FP cubre parte del mercado laboral, pero no sustituye a los graduados universitarios. Cada uno en su nivel.
"No hemos recibido en este año reivindicaciones de los estudiantes para que vuelvan las macroespichas"
– Un tema siempre complejo es el de las fiestas universitarias. ¿Van a volver las espichas al Campus de Vegazana? ¿Cuándo?
– De momento, los estudiantes están contentos con el modelo de fiestas que tenemos. Están celebrando sus fiestas en el campus de forma controlada en las facultades y no hemos recibido en este año reivindicaciones de los estudiantes para que vuelvan las macroespichas. Se están haciendo en la plaza de toros y parece que es un modelo que está funcionando. Estamos siempre abiertos y tenemos un diálogo constante con los estudiantes y con la Junta de Estudiantes. No es algo que les esté preocupando en este momento.
– En el apartado de infraestructuras, las obras parecen avanzar a buen ritmo en la Casa del Estudiante. ¿Cuál será la inversión final del proyecto y cuándo podrá estar operativo? ¿Cómo cree que dinamizará la vida universitaria?
– La idea es que la Casa del Estudiante esté ya en marcha a lo largo de 2026. Va a ser un centro dedicado a los estudiantes en el que va a haber desde asociaciones hasta actividades, salas de estudio, salas de trabajo colaborativo… Va a ser su casa, su espacio. Las obras van perfectas.
"La idea es que la Casa del Estudiante esté ya en marcha a lo largo del 2026"
– La reforma de Filosofía y Letras y un nuevo centro deportivo también se encuentran entre sus proyectos. ¿En qué fase están actualmente?
– Con la reforma de Filosofía y Letras sí que estamos haciendo números para poder abordarla porque es importante. Empezaremos con el cambio de las ventanas. El centro deportivo, quizás, tiene que esperar un poco por el tema de presupuestos y porque el Grado en Medicina también requiere de sus instalaciones. Estamos luchando por la financiación de infraestructuras de la Junta de Castilla y León y, aunque el proyecto del centro deportivo está hecho, necesitaríamos financiación. Poco a poco.
– El proceso electoral de hace un año fue un tanto complejo, con tres candidatos e incluso con la judicialización de las elecciones. ¿Se encuentra ya la ULE plenamente unida? ¿Siente que están remando todos a una para la consecución de los objetivos propuestos?
– Hace no mucho me comentaban que sí, que los consejos de gobierno discurren con absoluta normalidad. Cada uno puede opinar, decir y aportar sugerencias a los puntos del orden del día. No tenemos especiales conflictos dentro de la comunidad universitaria y, lo que dije cuando gané, al final, yo voy a ser la rectora de todos. Así debe de ser y yo velo por la unidad y porque existan los menos conflictos posibles.