Un municipio «trabajador e inquieto» por dotar a sus vecinos de los mejores servicios y abrirse al resto de la comarca. Ese es el eje principal del empeño y el esfuerzo que el Ayuntamiento de Pobladura de Pelayo García ha realizado para crear un nuevo espacio coworking con un proyecto denominado Inno-rural (Desarrollo rural, servicio de proximidad y empleo).
Todo ello gracias a una subvención para proyectos innovadores para la transformación territorial y la lucha contra la despoblación concedida en concurrencia competitiva por parte del Ministerio de la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) por la que el consistorio paramés ha adecuado la planta superior de la Casa de Cultura del pueblo para habilitar este nuevo espacio coworking que este lunes fue inaugurado de forma oficial.
Un acto inaugural donde el alcalde de Pobladura de Pelayo García, José Ángel Tranche, dio a conocer tanto el funcionamiento como el objetivo del proyecto Inno-rural en el que se enmarca el espacio coworking a todos los asistentes entre los que se encontraban muchos alcaldes y representantes de ayuntamientos de la comarca, así como el director general de Caja Rural de Zamora, Cipriano García, y otros representantes de la propia entidad financiera.
En cuanto al proyecto, Tranche indicó que el espacio coworking «nace con el objetivo de dotar de servicios al pueblo, para que aquellos que quieran teletrabajar tengan un lugar ideal, pero que también está abierto al resto de la comarca del Páramo». Además, explicó que dicho espacio de coworking, «totalmente informatizado y con conexión a internet», cuenta con diferentes salas: una para un aula de formación en la que se puedan ofrecer cursos para parados, otro sala totalmente diáfana para las personas que necesiten teletrabajar, un despacho y una sala de reuniones.
Asimismo, el regidor resaltó que una de las grandes novedades es que han firmado un acuerdo con Caja Rural de Zamora a través del cual la entidad financiera comenzará a prestar servicios financieros con una oficina virtual en el municipio todos los jueves por la tarde en el propio espacio coworking; a la par que agradecía a Caja Rural el «esfuerzo y valentía» por apoyar el medio rural y ayudar a mejorar la calidad de vida del municipio.
Proyecto piloto de Caja Rural
La apuesta de Caja Rural de Zamora por abrir una oficina virtual en el espacio coworking de Pobladura de Pelayo García todos los jueves por la tarde servirá de proyecto piloto para la entidad financiera con la vista puesta a poder realizar la misma función en otros pueblos.
En concreto, Caja Rural prestará su servicio financiero para conocer las necesidades de los vecinos del municipio que se acerquen a la oficina del espacio coworking. A partir de ahí, en base a la demanda, analizarán diferentes alternativas: como la puesta en funcionamiento de un cajero automático o hasta la apertura de una oficina de la entidad todos los días en función de los clientela que consigan atraer.
Una apuesta por realizar este proyecto piloto en Pobladura que el propio Cipriano García explicó que viene motivada por el «entusiasmo» de un pueblo «innovador» con un espacio coworking «que es un halo de esperanza y de desarrollo rural para que la gente apueste por quedarse en los pueblos». «Queremos ser partícipes en la medida de los posible de los proyectos novedosos que surjan en este pueblo y su comarca que fomenten el asentamiento rural», añadió.
Asesoramiento a emprendedores
Un proyecto Inno-rural que va mucho más allá y, muestra de ello, aparte de la adecuación de las instalaciones, el espacio coworking cuenta con el apoyo y asesoramiento de un agente de desarrollo «para todos aquellos emprendedores del pueblo como de la comarca que servirá de guía para todo el proceso de creación y tramitación, además de gestionar las ayudas y subvenciones existentes en el ámbito local, autonómico, nacional y europeo», apuntó Tranche, que concluyó: «va a ayudar a todo aquel o aquella que quiera en todo los que necesite para impulsar su proyecto».
Inno-rural nace también con la vocación de crear empleo, por eso la formación tendrá un papel fundamental con diferentes cursos. En base a ello, la primera formación que surge es ‘Más que activas’, destinada a mujeres para asesorarles y con la idea de ayudarles a crear empleos.
Un espacio coworking que busca dejar claro que, si se quiere, se puede vivir en el medio rural.