¿Por qué, mientas en España en 1930, el 30 % de la población era analfabeta, en la montaña leonesa apenas había analfabetismo? ¿Porqué, a pesar de una dieta que hoy consideramos perjudicial para la salud, la mayoría moría octogenarios nonagenarios? ¿Cuáles son los rasgos distintivos del carácter montañés? ¿Por qué no existía enfermedad mental en la montaña? ¿Por qué los pueblos montañeses no generaban basura?
Las anteriores, y otras muchas, son algunas de las preguntas que se plantea el piscólogo Miguel Ángel González Castañón como punto de partida de una conferencia que el martes ofrece en Valdepiélago, en la que irá respondiendo a las mismas y también a otras muchas historias cotidianas, que han pasado a formar parte de la cultura popular durante décadas y se van perdiendo al ir rompiéndose esa cadena de la tradición oral y, sobre todo, a causa de esa despoblación tan presente en todas las quejas.
Ha titulada su charla ‘Lo que la montaña enseña’, por ser la montaña del Curueño su marco vital y el lugar donde desarolla su vida, de su lugar de nacimiento, Valverde de Curueño, a su reesidencia habitual, Valdepiélago. «Por supuesto que todas las comarcas tendrán estas u otras preguntas que se pueden, y se deben, responder. Yo daré a conocer algunos aspectos del estilo de vida de los montañeses. Se hablará de la influencia de la montaña en todos los aspectos de la vida en ella. Desde Hipócrates, en el S. IV a.d.c. que ya analizó las definitorias influencias del aire, las aguas y los lugares en el carácter y en el comportamiento de las personas;después Galeno (S.II d. d. c.) siguió la tradición hipocrática, que se mantuvo hasta principios del S.XX. También veremos cómo el P. Feijoo describe las duras condiciones de los habitantes de la montaña».
- ¿Algún personaje del siglo XX?
- Uno, que me parece fundamental,uno de los más ilustres montañeses, Vicente Diez Canseco, médico, natural de Genicera, que escribió sobre una epidemia de viruela que padeció León en 1863, conocedor de la salud y la enfermedad de los montañeses, que ya demuestra la inmunización de las mujeres montañesas contra la viruela, al ser las encargadas de ordeñar las vacas.
- La larga vida de los montañeses, de la que hablas, ¿es un mito?
- Mito no, un curioso fenómeno este de la larga vida de los montañeses, a pesar de dietas que hoy se considerarían perjudiciales para la salud. También se analizará el carácter de los montañeses, muy marcado por las duras condiciones de vida, que es una mezcla de individualismo acérrimo y cooperación comunitaria ( visible en concejo y hacenderas.
Son algunos de los aspectos que analizará, junto a otros como detallarán los principios por los que se regían en la felicidad y en la desgracia, observando la fuerza de las pasiones y los colchones emocionales que utilizaron ante las vicisitudes de la vida. Se sintetizarán los aprendizajes desde la infancia hasta el abatimiento de la decrepitud.
- ¿Otro mito o realidad, la elevada tasa de escolarización?
- Ahí no hay discusión, son datos, en 1930 el 30% de la población española era analfabeta y, sin embargo, en la montaña apenas había analfabetos.
En fin, muchos aspectos, entre otros el humor montañés, ilustrado todo ello con historias cercanas y conocidas por Castañón, algunas de ellas familiares, «para darles más verosimilitud, comprobar la cercanía y ver la importancia de mantener la tradición oral». A ellos podrían partenecer otras de las preguntas que se hace el ponente para plantear el desarrollo de la conferencia: «Cuántas profecías de las lanzadas por el profeta de Valverde se cumplieron? Y de las que quedan por cumplirse ¿cuáles son las más inquietantes? ¿Mató Crodulfo, por celos, hasta al gocho? ¿Tuvieron las truchas de Cerulleda, en algún momento, el lomo pelado? ¿Ser apareció de verdad la Virgen a Ismael en La Vecilla?
- Una de las historias familiares es la de su tatarabuelo, que era profeta.
- Eso parece o, cuando menos, le llamaban ‘el profeta de Valverde de Curueño’, mi tatarabuelo, se sabe que formuló al menos cuatro profecías, allá por el año 1920. Dos ya se han cumplido: Dijo que los hombres pisarían la luna y aseguró que vendrían momentos en que el hambre nos haría comer hasta los ‘pegamanos’ (frutos pegajosos de una enredadera ), que se comieron en tiempos de la guerra civil echando mantas por las praderas donde se crían, según me contó mi abuela Teodomira. Otra que tiene que ver con el cambio climático: dijo que llegarían tiempos en que sólo sabríamos del cambio de las estaciones por la caída de las hojas de los árboles, que perece que s e va cumpliendo y, la última, dijo que llegarían tiempos en que los hombres, acosados por las mujeres, tendrían que subirse a las copas de los árboles;que es a la que yo me refiero como preocupante, pero ahí está».
Y la historia tiene un remato que habla del humor montañés: « Un hombre de la montaña, poco crédulo, para tomarle el pelo, se le acercó y le interrogó por el futuro de su familia. El profeta le contestó: ‘todos están bien, sobretodo tu padre. Creyó el montañés haberle pillado en un error y le dijo: mi padre lleva diez años muerto. A lo que el profeta, sin inmutarse, contestó: Tu no tienes ni idea de quien es tu verdadero padre».
- Es muy llamativa la pregunta sobre Crodulfo y los celos.
- Crodulfo, natural de Olleros de Sabero, hombre trabajador, se casó con la maestra y fueron acumulando un buen capital. Pasó el tiempo y la descendencia no llegaba. Oyó como sus cuñados y otros vecinos decian que estaba trabajando para los sobrinos, en tono de burla; así que el día de la matanza del gocho, que reunía a toda la familia, mató a sus suegros y a sus cuñados y cuñadas, y dejo viva a su mujer, a la que le dijo «a ti te dejo en este mundo para penar y sufrir, a ti te dejo en este mundo para que te acuerdes de mi». Había planificado huir a Portugal, para lo que contrató un taxi que le esperara en el cruce de Cistierna, pero como se entretuvo en la matanza, el taxi se cansó de esperar y regreso al León. Al ver que no podía marcharse, fue al pórtico de la iglesia de Sabero y se pegó un tipo en la sien.
- Uff. La última, ¿se le apareció la Virgen a Ismael?
- Depende, no se sabe si compinchados con el cura, el caso es que cogieron una imagen de la virgen, la pusieron en un árbol y echaron sal en la pradera alrededor, sabedores que todas las ovejas que cuidaba Ismael acudirían, porque la sal es un manjar para el ganado. Cuando Ismael vió la imagen de la Virgen y la devoción de sus ovejas, hincó las rodillas en el suelo y comenzó a darse golpes en el pecho y a pedir perdón por su incredulidad. Las amigos, escondidos fueron testigos de su conversión y el pastor acudía a misa diariamente.