Los vecinos de La Rosaleda estudiarán medidas jurídicas contra la ORA

Vecinos y comerciantes de la ORA han vuelto a dejar claro su no rotundo a la ORA en la reunión con el concejal de Obras en el Ayuntamiento de Ponferrada, José Antonio Cartón. Incluso plantean demandar jurídicamente si el contrato no se ajusta a derecho, algo que examinarán estos días.

Pese a que el Consistorioofrecía una oferta de unas 40 plazas sobre las 174 previstas para paliar la “deuda” de aparcamiento de pago que mantiene con la concesionaria Dornier después de haber eliminado aparcamientos en otras zonas de nueva urbanización, los vecinos consideran que “es una cuestión de que el barrio no lo quiere”, explicó su representante, Pedro J. Villanueva “no hay ORA en ningún barrio, solo en el centro, porque las plazas de la zona alta se consideran centro. Si nosotros lo aceptamos abrimos la puerta a que se pueda poner en otros barrios”, dijo. Por eso pide la unión de las asociaciones contra la ORA, un sistema contra el que ya se ha abierto una solicitud de firmas por internet.

Los vecinos de La Rosaleda por su parte han presentado las 3.000 que han recogido ante el concejal, explicándole que “es un impuesto que nos dan pero que no conlleva ningún beneficio” en un barrio “que somos los que más impuestos pagamos, pero los que menos servicios tenemos”.

Es más, dice Villanueva que deberían denunciar “que se nos vendiera un barrio cuando compramos las viviendas que no se ha desarrollado, solo tenemos una iglesia”.

Considera que que los comerciantes del centro pidieran que se llevara la ORA a La Rosaleda tras ponerla en el centro fue pretender “trasladar su error a nosotros, que no tenemos ninguna culpa”, por eso Villanueva hace una reflexión sobre culpables y se mantiene de momento al margen de un posible “boicot” de compras en el centro “nos gusta el centro porque allí llevamos a nuestros hijos al colegio y allí compramos y somos 30.000”.

Por eso considera que le toca al Ayuntamiento mover ficha y encontrar una solución política. No le pide al resto de partidos que se posicionen, aunque muchos lo han hecho “no queremos que las asociaciones se politicen, porque tenemos un movimiento vecinal sano que queremos mantener”. Por el momento marca un espacio de tiempo de una semana a la espera de que el Ayuntamiento tome una decisión y la propia agrupación diseñe un plan que comenzaría por trasladar su rotunda oposición y las firmas recogidas al PSOE regional con el fin de dar cuenta del coste político que tiene esa medida en un barrio cuyo voto en las últimas elecciones paso del PP y PSOE.

Villanueva considera que la ORA es un sistema que debe encajar en zonas con un amplio movimiento de vehículos y no es el caso en La Rosaleda, por lo que considera que el fin es recaudatorio para una empresa con la que se mantiene un contrato que no ha estado bien estructurado desde el principio.

De hecho Cartón reconoce que el anterior equipo de gobierno no cumplió con las condiciones del contrato que ahora se les pide con la devolución de 184 plazas de las que se pretendía colocar en La Rosaleda 174 de inicio, ahora 40 menos “y sin afectar a ningún portal”, explica el concejal.“Seguimos defendiendo que no se perjudica ni a vecinos ni a comerciantes. Estamos dispuestos a negociar las condiciones”, dijo Cartón con talante dialogante, pero manteniendo que se debe cumplir el contrato “haremos las cosas entorpeciendo lo menos posible a los vecinos”. Lo que sí comprometió es que estas serán las únicas plazas de la ORA en el barrio, algo que para Villanueva es un compromiso “en vacío, porque no sabemos quién va a venir a gobernar después”.