Son quienes tienen raíces en Lodares, localidad anegada por las aguas del embalse del Porma, los que cada año se reúnen el primer fin de semana del mes de agosto para celebrar la romería en honor a su patrona, la Divina Pastora. Cada vez quedan menos vecinos del pueblo, pero han sabido trasladar a sus descendientes el amor a esa tierra que les vio nacer para que sigan acudiendo a este encuentro festivo a orillas del embalse que acabó provocando su marcha.
En sus inicios, esta romería logro reunir a cerca de un millar de asistentes y en la actualidad puede que no lleguen al centenar, pero su ilusión sigue siendo la misma que hace casi 40 años. En las primeras ediciones, el Gamonal de Lodares era un secarral y estos activos vecinos –con la benevolencia de la Confederación Hidrográfica del Duero– han logrado transformar esta pradera en un vergel de sombras gracias a la plantación de decenas de arboles, además de construir la ermita donde descansa la santa.
Este domingo, como continuación de la tradición de entregar una placa a todos los socios que han llegado a cumplir los 85 años, le tocó el turno a María del Pilar Martínez, aunque fue recogida por su hija, Pilar Merino.
Para finalizar la jornada matinal, la Asociación Cultural Amigos de la Montaña del Porma invitó a todos los asistentes a la degustación de la ya tradicional torta de la Pastora con la correspondiente bebida al inicio del baile-vermú. Mientras, en jornada de tarde se celebró el concurso de bolos y también hubo juegos infantiles. Tras la entrega de premios a los ganadores, una hacendera para la limpieza de la pradera antes de poner fin a la fiesta.
Cabe destacar que, tras las últimas elecciones, la asociación tiene como presidente a Jaime González, que cubre la baja dejada por Benito González tras estar nueve años como vicepresidente y otros 18 como presidente.