Un joven de 30 años se convirtió este sábado en el cuarto leonés que fallece trabajando en solo dos semanas. Un julio negro para la provincia en lo que tiene que ver con los accidentes laborales, en un año especialmente duro en lo que tiene que ver con este tipo de tragedias, también acompañado por las malas estadísticas en los accidentes de tráfico.
La Guardia Civil y personal de la Inspección de Trabajo investigan las circunstancias del accidente, similar por el tipo de actividad al ocurrido hace poco más de una semana en Vilamartín de Valdeorras (Orense), que se saldó con la muerte de un vecino de Bembibre de 44 años así como dejó herido y trasladado al hospital a un leonés de 47 tras la caída de una piedra en una cantera de pizarra.
Del mismo modo, a falta de que las autoridades judiciales esclarezcan los motivos del accidente, se cumplen también poco más de dos semanas de la tragedia que sacudió a toda la provincia, de luto tras el accidente en Lugo que se cobró las vidas de Marcos y Joseph, dos leoneses de 19 y 21 años que realizaban las prácticas del módulo de instalaciones eléctricas que estudiaban en León. El coche en el que viajaban era arrollado por un tren cuando éstos atravesaban un paso a nivel con muy poca visibilidad mientras se dirigían a una subestación junto a las vías, con un tercer joven de La Bañeza que por suerte se recupera tras pasar por la UCI. Hay que recordar que según la normativa, los accidentes ‘in itinere’, es decir en el desplazamiento desde o hacia el puesto de trabajo, también están considerados laborales.
Precisamente a principios de mes se publicaba el informe con los accidentes laborales de los primeros cinco meses del año, que en la provincia de León sumaban 1.536, un 4,1 por ciento menos que en el mismo periodo del año 2022. La industria vuelve a ser el sector que más accidentes concentra. Según los sindicatos, «se podrían haber evitado un gran número de accidentes si existiera un mayor compromiso por parte de los empresarios con la seguridad y la salud de las personas trabajadoras y se fomentara la cultura preventiva en los diferentes estamentos del tejido productivo, así como de una formación e información específica y adecuada a la realidad de los trabajadores y las trabajadoras en cada centro de trabajo».