León liquidará este año los 250 millones de ‘facturas en cajones’

La labor de saneamiento de las arcas municipales que ya iniciara el anterior equipo de gobierno encabezado por Emilio Gutiérrez continúa dando sus frutos y el concejal de Hacienda –de entonces y de ahora–, Agustín Rajoy, afirmaba este miércoles que al cierre de este año 2016 esperan haber reducido la deuda total del Consistorio leonés a 236 millones de euros, una cifra que, aunque voluminosa, dista mucho de los 434 millones en los que se cuantificó la deuda que había al cierre de 2010.

Así lo avanzaba el edil en la presentación del Plan Económico Financiero elaborado por el Ayuntamiento de León para ajustar los desarreglos derivados de la inclusión en el presupuesto de 2016 del crédito para pagar la deuda con Urbaser, que ha supuesto el inclumpliento de la ley de estabilidad presupuestaria, y el hecho de haber destinado el dinero previsto para pagar intereses del crédito para el pago de proveedores –que fueron suprimidos temporalmente por el Ejecutivo central– a otros fines como devolver el 4% de la rebaja salarial aplicada a los trabajodores, que suponían el incumplimiento de la regla de gasto.

Este plan, cuya aprobación compete a la Junta de Castilla y León y que, según indicaba ayer Rajoy constituye un mero trámite, permite al Ayuntamiento cumplir con los objetivos de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera.

Además, Agustín Rajoy aprovechaba para adelantar que la previsión es que al cierre de este año queden liquidados los 250 millones de euros de facturas ‘encontradas en los cajones’, es decir, los compromisos de pagos y las operaciones fuera de presupuesto. Por todo ello, estimó que al final de este año la deuda municipal ronde los 236 millones de euros, lo que supone una reducción del 47% de los 434 millones de euros en los que se cifró la deuda del Ayuntamiento de León al cierre de 2010.

Rajoy reconoció que para «limpiar» 250 millones de euros hace falta «mucho esfuerzo» tanto por parte de los ciudadanos como de la corporación municipal y apostilló que para haber saldado esta deuda de forma rápida habría sido necesario que no se abonaran los salarios ni los servicios esenciales, aunque «eso no se ha hecho», dijo. Ese Plan Económico y Financiero supondrá continuar actuando «con la misma diligencia que hasta ahora» y aplicando «rigurosamente» los planes de ajuste «con la misma diligencia y nivel de exigencia». En cuanto a la deuda, Rajoy confirmó que el objetivo de deuda no se cumplirá hasta el año 2023 «si los remanentes siguen siendo como han sido hasta ahora», y agradeció el «apoyo prestado y la capacidad de entendimiento» tanto al Gobierno de España, por los planes de pago a proveedores, como a la Junta y al resto de grupos municipales. Por otra parte, vaticinó que el cumplimiento de objetivos de estabilidad permitirá que en 2017 haya un superávit, en términos de capacidad de financiación, de casi 15 millones.