El acto estuvo presidido por el rector de la ULE, Juan Francisco García Marín, y la secretaria general, Pilar Gutiérrez Santiago, ejerció de maestra de ceremonias. En la cita se han impuesto las insignias a los doctores del curso 2017-2018, se ha investido a los nuevos, y se han hecho entrega de los Premios Extraordinarios, las Distinciones Honoríficas por 25 años de servicio y las de jubilación. También se ha concedido la Medalla de Oro de la ULE, a título póstumo, al profesor Jesús García González.
García Marín ha valorado positivamente el curso académico próximo a terminar. "Desde el punto de vista académico estamos a la cabeza en falta de abandono y en investigación se ha mejorado. Se están haciendo proyectos nuevos y el ranking que ha salido ahora nos sitúa abajo en el aspecto tecnológico y, por tanto habrá que mejorar", ha apuntado el rector a este periódico.
El acto contó con la presencia del alcalde de León, Antonio Silván, el Procurador del Común, Tomás Quintana, el subdelegado del Gobierno, Faustino Sánchez, la directora general de Telecomunicaciones de la Junta, Victoria Seco, el juez decano, Alberto Gómez García, y representantes de los colegios profesionales y de los ámbitos empresarial, militar y eclesiástico.
Un motor para León
En el año el que se celebra el cuadragésimo aniversario de la institución, su rector ofreció un discurso en el que destacó el papel de la ULE como parte activa de la sociedad leonesa y en el que reiteraba su ofrecimiento para colaborar e implicarse en proyectos que impulsen el desarrollo de León, ya que considera que la institución educativa "debe ser y es motor económico de su entorno".
García Marín reconoció que todavía "queda mucho por corregir y mejorar", aunque considera que la institución "está en el buen camino". "En investigación estamos al nivel de Salamanca y por encima de Burgos y Valladolid, algo impensable hace unos pocos años", apuntó a modo de ejemplo.
Igualmente, el rector quiso hacer mención al crecimiento de las prácticas de los alumnos de grado, que superan las 3.300 por curso, o el hecho de ser la universidad con menor tasa de abandono de todo el país. "La educación es una inversión y no un gasto", reivindicó García Marín.
Con motivo de la celebración de su fiesta patronal, la Universidad quiso recordar que en los tres años que lleva al frente de la institución García Marín se han duplicado las plazas de profesorado creadas en los seis años anteriores y también la aprobación de la relación de puestos de trabajo del personal de administración y servicios funcionario. No obstante, el rector insistió en sus palabras en "no caer en la complacencia" y formuló su propósito de renovar y consolidar la plantilla favoreciendo e impulsando la investigación.
La interpretación del himno universitario 'Gaudeamus igitur' a cargo del Coro de la ULE puso el broche final a la ceremonia. Una melodía que les ha acompañado durante estos 40 años y que esperan lo haga, al menos, en otros tantos.