Los Reyes Magos nunca defraudan. Pasan los años, las generaciones, los siglos, pero su llegada continúa desbordando la ilusión de los más pequeños cada Navidad. Melchor, Gaspar y Baltasar regresaron este jueves a la ciudad de León en una jornada que estuvo marcada por una magia que, por estas tierras, siempre es real.
Sus Majestades llegaron por la mañana en un tren con salida de Oriente a la estación de León y, posteriormente, fueron recibidos por las autoridades municipales en el Ayuntamiento de San Marcelo. A la tarde, en uno de los momentos más especiales de cada comienzo de año, fue el turno de la gran cabalgata por las calles de la ciudad. No obstante, el punto culminante para Melchor, Gaspar y Baltasar llegará por la noche, con horas y horas de intenso trabajo para llevar sus regalos y bendiciones a todos los rincones de la provincia.
Sus Majestades llegaron por la mañana en un tren con salida de Oriente a la estación de León y, posteriormente, fueron recibidos por las autoridades municipales en el Ayuntamiento de San Marcelo. A la tarde, en uno de los momentos más especiales de cada comienzo de año, fue el turno de la gran cabalgata por las calles de la ciudad. No obstante, el punto culminante para Melchor, Gaspar y Baltasar llegará por la noche, con horas y horas de intenso trabajo para llevar sus regalos y bendiciones a todos los rincones de la provincia.