Hoy, Oposalud, que así se denomina su academia, se ha convertido en una empresa nacional de referencia dentro de su sector y presta servicio en casi una decena de comunidades autónomas, con unos excelentes resultados. En concreto, en la Comunidad Valenciana, Castilla y León, País Vasco, Asturias, Galicia, Aragón, Canarias, Cantabria y Madrid.

Hasta un 95% de aprobados
Con respecto a ese porcentaje de éxito, que ronda el 70 por ciento, Ana Isabel Reguera sentencia que «esto obviamente depende del examen, porque en algunos casos hemos llegado al 95 por ciento de aprobados, y siempre contando con alumnos entre los diez primeros puestos».
Para ella, el objetivo fundamental de Oposalud se centra en «transmitir la manera con la que hay que afrontar el examen», algo que obviamente ha de ir secundado con «una buena preparación».
El curso se imparte de manera presencial durante diez meses en las ciudades correspondientes a comunidades autónomas en las que se han convocado oposiciones. Su precio ronda los 1.500 euros, a partir de un pago periódico durante el tiempo que dura la formación, aunque cuenta con una oferta, disponible en su sitio web, que rebaja esa cantidad a 1.400 euros.
Una de las cuestiones que más destacan los alumnos es que «la academia se vuelca con ellos, de principio a fin». Al respecto, apunta que «hay un equipo de tutores que motivan, animan y refuerzan, pero también un grupo de profesores muy cercanos y con un trato muy humano». Una circunstancia, opina, que «independientemente del número de alumnos», ya se ha convertido en su seña de identidad.
El respaldo de Iberaval
Ana Isabel Reguera acudió a Iberaval para asegurar su liquidez, dado que el COVID-19 también impactó en su sector. En este contexto, considera que «el personal de la sociedad de garantía fue atento, eficiente y sobre todo ágil, y junto a ellos quiero destacar el papel que tuvo la directora de la oficina de Laboral Kutxa, que nos puso en contacto». A su juicio, lo mejor de ese contacto con Iberaval fue que «permitió un acceso a financiación más asequible y bien gestionada.Iberaval se ha convertido en un aliado clave de cientos de empresas en el último año, con motivo de la pandemia. Concretamente, en León, la sociedad de garantía (SGR) se ha valido del respaldo de la Junta de Castilla y León para bonificar préstamos, lo que le ha permitido facilitar más dinero que nunca.
Sólo en el primer trimestre de 2021 la sociedad de garantía ha financiado 104 operaciones por 10,1 millones de euros, lo que supone un 57 por ciento más que en el mismo periodo de 2020.
En este momento, Iberaval cuenta con 4.506 socios en la provincia de León –donde cuenta con dos delegaciones, la de la capital y la que se encuentra en El Bierzo–, que suponen en torno al 14 por ciento del total de la SGR.
Iberaval, además, es un activo fundamental para el mantenimiento del empleo en la provincia, dado que, gracias a su financiación, contribuye al sostenimiento de casi 17.000 puestos de trabajo (16.951), de los que el 92 por ciento tienen carácter fijo.