Un proyecto que nace con ilusión, en este este caso la de un principiante en el sector, Alfonso Alonso, que se ha dedicado en cuerpo y alma a preparar el albergue e informarse sobre la mejor manera de poder ofrecer un servicio acorde a las necesidades de los peregrinos del siglo XXI. En palabras del propietario, «nos hemos asesorado bien porque queríamos que todo estuviera en las condiciones adecuadas. Estuvimos hablando con Luis Gutiérrez Perrino, el presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de León. Nos ha ayudado mucho. Cumplimos con toda la normativa que exige la Junta y también nos hemos dejado asesorar en cuanto al mobiliario y otros detalles. Queremos que los que nos visiten puedan tener la máxima satisfacción, aunque seguro que con el paso de las semanas iremos corrigiendo cosas».

«Mi hermano es el que me ha metido en esto»
Reciclarse a los 50 no es precisamente fácil. Alfonso Alonso se dedicó durante más de dos décadas al sector de la construcción. La crisis le ha obligado a buscar nuevos horizontes. Afortunadamente para él, no está solo en este camino (nunca mejor dicho). «Lo de la construcción estaba muy apagado en los últimos tiempos y al final hubo que cambiar de rumbo. Empiezo con esto gracias a mi hermano, que es muy aficionado al Camino de Santiago desde siempre y es el que me ha liado para montar un albergue. Él me echará una mano en la gestión cuando pueda», dice el director de Check in León, que no ha dudado en dedicar los últimos doce meses a preparar con mimo un proyecto en el que tiene depositadas todas sus esperanzas e ilusiones. «Hemos estado un año ultimando los detalles del albergue. Encontramos un local bien situado que además nos permitiría colocar un buen número de camas. Al final me decidí a a invertir y aquí estamos. Hay que lanzarse». Ahora, el Camino es su vida.
Buenas previsiones
La afluencia de peregrinos aumentará este año en la ciudad de León. Son al menos la previsiones que se derivan del aumento que se ha registrado desde el mes de marzo en la retirada de compostelanas en Santiago –cerca de un 30% más respecto a las mismas fechas del pasado año–. Según la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de León, este año se podrían superar con creces los 45.000 peregrinos recibidos por la ciudad en 2014. El objetivo: alcanzar la simbólica cifra de 50.000. Un registro que de cumplirse, hará todavía más necesaria la aportación de este nuevo albergue llamado Check in León. Con él ya son seis los albergues de peregrinos con los que cuenta ya la ciudad de León.
Al ubicado en el monasterio de Las Carbajalas se unen cinco de titularidad privada como son los de Santo Tomás de Canterbury, San Francisco de Asís, Miguel de Unamuno, La Muralla y el recién incorporado Check In León. En total, cerca de 450 camas que desde la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de León se consideran «suficientes», sin que ello suponga que no sigan echando en falta un alojamiento para la Ruta Jacobea gestionado por el Consistorio de la ciudad. El presidente de la asociación, Luis Gutiérrez Perrino, todavía no ha olvidado el disgusto que supuso el cierre, en 2012, del albergue municipal situado en las instalaciones del CHF. 90 plazas que se borraron de un plumazo y que en un futuro podrían ser necesarias, por no hablar del empleo que podrían generar. «Esta ciudad es estratégica en el Camino y eso hay que aprovecharlo. No hay que olvidar que León es la segunda ciudad de arranque de toda la Ruta Jacobea. Todo lo que sea aumentar la oferta de albergues es bueno para León. Después, que sean los pegrinos lo que elijan su alojamiento preferido», señala el presidente de la asociación. En este sentido, Gutiérrez Perrino estará atento a lo que ocurra en las próximas elecciones municipales. «Ojalá la nueva corporación que salga del proceso electoral tenga interés en retomar el albergue municipal, o al menos, poner en marcha una buena oficina de información en la Casa del Peregrino de San Marcos». Sobre Check in León, Gutiérrez Perrino alaba el proyecto: «Es moderno, ofrece calidad y no tiene barreras arquitectónicas. A los peregrinos les va a gustar».