La cigüeña sale del Erte en León

La cigüeña vuelve a tener en León el mismo volumen de trabajo que tenía antes de la llegada de la pandemia. Después de que las cifras de natalidad cayeran a mínimos, por el desplome del número de bebés concebidos durante el confinamiento de la primavera de 2020, el pasado año se cerró con 2.315 bebés, en una cantidad similar a la que se contabilizaba en años previos al Covid.

León experimentó una especie de 'baby boom a la inversa' en diciembre de 2020 y enero de 2021, justo nueve meses después de la irrupción del coronavirus. No obstante, las cifras de natalidad en la provincia se fueron recuperando de manera progresiva hasta conseguir que el pasado año se cerrase con mayor cantidad de nacimientos que el anterior, que dejó tan solo 2.276.

Los mejores meses del año en lo que a la llegada de leoneses al mundo se refiere, según los datos a cierre de ejercicio que actualizó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE), fueron marzo y julio con 223. Del mismo modo, estas estadísticas ponen de manifiesto que nueve meses después de la tercera ola de la pandemia, que también sacudió con fuerza a la provincia, también se produjo un descenso significativo en la natalidad. La cigüeña no tuvo excesivo trabajo en el tramo final del 2021, aunque sí que se produjo cierta recuperación en el mes de diciembre, cuando nacieron 192 niños y niñas.

En la segunda mitad de los setenta en León nacían más de 7.000 bebés al año y en meses como mayo de 1976 se llegaron a registrar en León 728 partos. Es decir, una media de más de 23 partos al día. Algo que contrasta con los 145 nacimientos de enero, nueve meses después del confinamiento por la irrupción del Covid, que dejan la media diaria de mujeres que dan a luz en menos de cinco. A esta caída de la natalidad se suma el envejecimiento del padrón y la despoblación rural para explicar la sangría demográfica que León arrastra.

El descenso del número de nacimientos en la provincia es palpable década tras década. Así, León empezó los noventa con 4.147 bebés. Cifras que disminuyeron en el 2000 a los 3.200. Sin embargo, durante los primeros años del siglo XXI sí que se experimentó cierto aumento en el número de partos, llegando al 2010 con 3.438 alumbramientos. Prácticamente un espejismo, ya que a partir de entonces se aceleró la caída en la natalidad hasta caer a mínimos con la llegada de la pandemia. El ligero repunte de 2021 que muestran los datos del INE, deja cierto margen al optimismo en un posible cambio de tendencia en lo que a natalidad se refiere.