La euforia navideña ha dado paso a la incredulidad en Villamanín. Apenas unos días después de celebrar que el ‘Gordo’ de la Lotería de Navidad había regado de millones la localidad, el pueblo leonés se enfrenta ahora a un problema tan inesperado como grave: la venta de participaciones que no estaban respaldadas por los correspondientes décimos consignados.
La situación ha desembocado este viernes en una reunión tensa, celebrada a puerta cerrada, sin acceso para la prensa y con presencia a las puertas de la Guardia Civil, reflejo del clima de nerviosismo que se vive entre los vecinos afectados.
Según las informaciones recabadas, la Comisión de Fiestas habría cometido un error administrativo al no devolver un taco de 50 papeletas, lo que implica que diez décimos del número 79.432 -premiado con el ‘Gordo’- nunca llegaron a existir oficialmente. La consecuencia es directa: hay cuatro millones de euros en premios que no pueden cobrarse, 80.000 euros por papeleta.
Ante este escenario, la comisión planteaba una solución extraordinaria a los agraciados: reducir el cobro del premio en un seis por ciento, unos 4.800 euros por papeleta, para repartir entre todos la pérdida generada por los décimos no consignados. Sin embar¡go, al cierre de esta edición no había finalizado ni había alcanzado consenso alguno.
«Quieren el collar y el perro»
Posturas para todos los gustos, y es que algunos, de los asistentes no estaban muy de acuerdo con la idea de tener que aportar dinero de cada papeleta agraciada. «Que pongan lo suyo sobre la mesa, pero no, parece que lo quieren todo, el collar y el perro», aseguraba una de las asistentes que abandonaba la reunión a mitad de la sesión.
Algunos de los vecinos se mostraban molestos por, a su juicio, falta de transparencia en algunas cuestiones. Así, una vecina, apuntaba que «no queremos que paguen con sus bienes, ni denunciar, pero que hagan las cosas claras, que pongan sus décimos y papeletas sobre la mesa. Hay varias cosas que no han gustado a la gente en la reunión».
«¿Qué más quieren de los chavales? Lo ponen todo»
Opiniones divididas, y es que algunos de los que abandonaban la reunión, ante la falta de acuerdo, aseguraban que «los chavales han puesto todo sobre la mesa. El décimo de la comisión y lo que llegaba cada uno de manera particular. Con eso no cubre, pero nos quitarían menos a casa uno. Aún así, hay gente que no acepta. ¿Qué más quieren? ¿Qué se hipotequen? Ha sido un error como el que podía haber tenido cualquiera».
Gran impacto económico
El impacto económico del premio en Villamanín había sido notable. En total, el ‘Gordo’ dejó en la localidad 35,6 millones de euros, correspondientes a 89 décimos vendidos a través de participaciones de cinco euros, a los que se añadía un recargo destinado a financiar las fiestas locales. Parte de estas papeletas fueron adquiridas también por vecinos de otras localidades de la comarca.
Desde la administración de lotería de La Pola de Gordón, donde la comisión compró los décimos, se explicó días atrás que 61 décimos del número premiado fueron devueltos, al no encontrar comprador, lo que hubiera supuesto otros 24,4 millones de euros.
Mientras tanto, Villamanín permanece a la espera. Lo que comenzó como una celebración colectiva se ha transformado en un conflicto delicado, en el que están en juego no solo millones de euros, sino también la confianza entre vecinos y el futuro de la comisión organizadora de las fiestas.
