El concejal de Juventud de Astorga, Borja González, continúa adelante con el programa ‘Sintonía Joven’, que puede seguirse en YouTube. Esta iniciativa se centra en una serie de videoentrevistas en las que el edil del área y promotor de la idea, pregunta a los entrevistados por su formación, su trabajo, porqué se decidieron o qué les llevó hasta allí, planes de futuro... Todo ello bajo el título ‘Sintonía Joven’, que nos llevará a conocer las experiencias de seis jóvenes. Según explicaba el concejal responsable de este proyecto, «entrevistamos a jóvenes maragatos y maragatas que pueden servir de fuente de inspiración para los jóvenes».
El programa de podcast ‘Sintonía Joven’ encara su quinto capítulo -ya disponible en Youtube- y lo hace entrevistando a Luis Fernández Olivares, que es rector del seminario diocesano de la ciudad de Astorga, y que cuenta su historia y vinculo con la ciudad bimilenaria.
Borja González inicia el podcast presentando a su invitado, Luis Fernández, sacerdote al que pregunta por su labor diaria, para poner a los espectadores en tesitura. «Mi día a día en realidad es, en realidad, muy complejo. Depende en realidad de la semana, del mes, de la temporada del año... Es verdad que al estar en el seminario, tengo un horario bastante equilibrado y cerrado, pero luego dentro de eso, muchos campos de trabajo. Por un lado aquí en el propio seminario, yo vivo aquí ahora, y atiendo a los seminaristas mayores de nuestra diócesis. Es decir, aquellos jóvenes que están preparándose para ser sacerdotes. Actualmente son dos y un diácono, tres. Y me dedico a eso. A acompañarles, a la formación, a vivir ese proceso con ellos». En ese sentido, como vicerrector. Además, lleva la gestión de la casa con otras cuatro personas que trabajan allí. Continuando con sus funciones en el seminario menor como institución, indicó que «me dedico a acompañar a sus familiar y a los adolescentes que están en él. Es decir, los que están en la ESO y Bachillerato. No viven aquí, vienen una vez al mes, soy yo el que se traslada a sus lugares de origen». Además, señaló que tiene otros campos a nivel de diócesis, siendo el delegado del obispo para el tema de los jóvenes y las vocaciones.
El edil de Juventud quiso saber cual ha sido el proceso que ha llevado al rector a donde está actualmente, «es algo muy interesante, no te dedicas solo a ser cura, llevas muchos temas importantes». Luis Fernández aseguró que «lo principal es ser lo que soy, es ser sacerdote. Tengo todos los tiempos reservados para cuidar mi vivencia sacerdotal: la eucaristía, la misa de cada día, la oración personal de cada día... Esto es así. Pero luego, como bien decías, el campo de trabajo es mucho mayor. Mi vida ha sido un proceso».
En este sentido, recuerda que estudió en el colegio público Santa Marta de Astorga, y pese a nacer en Vega de Espinareda, se trasladó a Astorga cuando contaba con 5 años. Una vez terminada la etapa escolar, en el momento de acceder al instituto, «se abría en ese momento el externado del seminario y mi párroco, que yo en aquel momento estaba en San Bartolomé, era don Emilio y yo era monaguillo, me dijo que si quería ir a probar allí. A mí me interesó». Conoció de cerca el trabajo de la Pastoral Juvenil, algo que le apasionaba, aunque de entrada no se veía como sacerdote, quería estudiar periodismo. Sin embargo «me invitaron a unos ejercicios espirituales para jóvenes, los primeros que se hicieron en nuestra diócesis, y después de una de las charlas que era sobre las vocaciones, a mi aquello... Me pareció que era como que lo hubieran pensando para mí». Ahí empezó el proceso.
Tras conocer un poco más a Luis Fernández, el concejal de Juventud lanza otra pregunta, en qué le ha influido Astorga positivamente y qué le ha motivado a volver. «Me ha influido en todo, porque aunque nací en El Bierzo, aquí es donde me he criado, he madurado, he crecido, he hecho los amigos de toda la vida... En realidad lo que me ha influido es a consolidar mi personalidad... Estoy muy contento de ser Astorga». En cuanto a qué le motivó a volver, explica que no fue una decisión personal, «me lo pidió el Obispo. Llevaba seis años de párroco en Viana do Bolo, he sido muy feliz allí, y también el colegio La Rúa, y en este septiembre pasado dentro de los cambios en la diócesis, también entraron los cambios en los seminarios, y me pidió si podía hacerme cargo de esta labor».
¿Qué destacaría de Astorga? «Lo que primero más destaco de Astorga es la gente, somos gente acogedora, se nota que pasa el Camino de Santiago, y el sentirse como en casa. Tiene además una particularidad, tiene todo lo de una ciudad, pero de una ciudad pequeña, como un pueblo si me lo permitís. Es cultura, es tradición, es fe...». Además de referirse a su riqueza arquitectónica e histórica.
Para finalizar, un mensaje para los jóvenes astorganos, «lo primero un mensaje de esperanza, porque a veces tendemos a centralizarnos en lo negativo, los jóvenes no son el futuro, son ya el presente. Ese mensaje de que tengan una meta, que no tengan una vida mediocre, todas las cosas cuestan esfuerzo, trabajo dedicaciones... que vayan a por ello, pero que lo hagan con alegría y esperanza».