El Consejo de Cámaras de Comercio de Castilla y León entregó ayer al rey Felipe VI la primera Medalla de Honor con distintivo de brillantes de la institución como «reconocimiento a su persona y a su trayectoria pública desde su coronación como Monarca» y símbolo de «expresión de la lealtad inquebrantable, respeto y admiración de las empresas de Castilla y León».
Durante el transcurso de la audiencia en el Palacio de la Zarzuela, el rey recibió al conjunto del Pleno del Consejo, que puso en valor su leal compromiso con el tejido empresarial del país y de la comunidad, con la que Felipe VI siempre ha estado vinculado.
Por parte de la Cámara de Comercio de León, los representantes fueron el presidente Javier Vega y Ángel Suárez Corrons.