Fabero se convierte en el primer Conjunto minero de Castilla y León declarado BIC

La Junta oficializa los trámites que delimitan seis enclaves mineros del municipio berciano

M.I.
05/07/2019
 Actualizado a 17/09/2019
El Economato es la estructura que más necesita mejoras. | DIANA MARTÍNEZ
El Economato es la estructura que más necesita mejoras. | DIANA MARTÍNEZ
El Boletín Oficial de Castilla y León publica la Orden de la Consejería de Cultura y Turismo por la que se produce la incoación como Bien de Interés Cultural con categoría de conjunto etnológico de la Cuenca Minera de Fabero. Con esta figura de protección, la Junta pretende preservar y poner en valor este importante patrimonio minero, que pasa a ser así el primer Conjunto minero de Castilla y León declarado BIC.

La Consejería de Cultura y Turismo ha realizado un trabajo de colaboración con el Ayuntamiento de Fabero para poner en valor el patrimonio minero de esa cuenca minera, una vez se ha producido la paralización definitiva de la explotación en las instalaciones existentes.

De este modo, los distintos trabajos ya ejecutados, con la rehabilitación del Pozo Viejo y otras edificaciones anejas en el Pozo Julia, se han completado con los estudios e investigaciones históricas necesarias. Todo ello ha hecho posible el expediente de incoación como Bien de Interés Cultural de la Cuenca minera de Fabero.

Esta incoación afecta al conjunto en sí, pero se concreta en la delimitación de seis enclaves: Pozo Viejo, Pozo Julia, Mina Alicia, Mina Negrín, Poblado de viviendas de Diego Pérez y Líneas de baldes e itinerarios.

A partir de ahora, tal como establece la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla y León, hay un plazo máximo de dos años para que se proceda a la declaración definitiva, pero desde este momento, el Conjunto Etnológico de Fabero goza de los derechos y deberes inherentes a un bien ya declarado. Entre otros, los propietarios de las viviendas afectadas por la incoación podrán acogerse a la línea de subvenciones que la Consejería convoca anualmente para los bienes del patrimonio cultural.

Se trata de una decisión pionera, a la que en el futuro se podrán unir otros enclaves mineros de Castilla y León, así como de una herramienta decisiva de cara a la utilización del patrimonio minero como fuente de desarrollo económico para esas zonas.

La alcaldesa de Fabero, Mari Paz Martínez mostraba su satisfacción por conseguir dar este paso "fruto del trabajo que hemos realizado a lo largo de los cuatro años pasados". Considera que es un avance que hace que "las instituciones ya no puedan mirar para otro lado", y le den el respaldo económico a las cuencas para sacar la cabeza como un bien turístico con potencial.

Para ello, asegura que haber sido declarado BIC abre las puertas a las subvenciones que Patrimonio concreta para estos bienes "incluso hay ayudas para hacer reformas dentro de las casas del Poblado de Diego Pérez hasta de un 70%", dice. Pero las obras más urgentes que se solicitarán se dirigen al Economato "que tiene problemas estructurales", apunta.

Sobre la mesa está el arreglo del castillete del Pozo Julia, con una inversión de unos 50.000 euros pero aún sin aprobar y embellecer la imagen industrial del conjunto por un importe parecido. Ya como una realidad están las obras del hospitalillo, que comenzarán este martes con una inyección de 40.000 euros de Patrimonio con el fin de reparar la cubierta "tienen que ver cómo están las maderas para intervenir". Esa obra dará paso a una mejora más profunda que podría costear Fomento y después a su musealización a más largo plazo.
Archivado en
Lo más leído