El piquete que desde las seis de la mañana de este miércoles está teniendo lugar a las puertas de las instalaciones de Everest, ha sido la excusa utilizada por la dirección de la empresa para suspender el encuentro previsto para hoy con el comité de los trabajadores. De esta forma, y según la interpretación que realiza el portavoz de la plantilla, Enrique Reguero, pierde fuerza la posibilidad de que se sometan a concurso de acreedores las divisiones Everest Editorial y Everest Distribución, tal y como se anunció este martes para el taller de Evergráficas junto a la extinción de empleo de sus 80 trabajadores. “Lo que se anunció ayer fue una primera fase de la reestructuración de la empresa que quiere realizar la dirección. De momento parece que no habrá más despidos, pero con el paso del tiempo los habrá. Está claro que el taller les sobraba, pero que nadie se engañe. En las otras dos filiales también habrá recortes tarde o temprano. Seguirán funcionando pero a menor escala”, vaticina Enrique Reguero. En Everest Editorial y Everest Distribución hay 220 empleos ubicados en León.
Dividir a la plantilla
El portavoz de los trabajadores advierte también sobre la intención que puede tener la suspensión de la reunión de este miércoles. Según sus palabras, “la empresa lo que quiere ahora es dividir a la plantilla para que dejen la huelga. Ofrecer algo de optimismo para calmar los ánimos. No tiene mucho sentido que se haya suspendido la reunión si la intención era anunciarnos otro concurso de acreedores para las otras dos filiales”. Sobre la continuidad de la huelga, será la asamblea de trabajadores prevista para el lunes la que dicte sentencia. La intención del comité es continuar con la misma. A las seis de la tarde de este miércoles, habrá concentración de protesta ante las puertas de la Subdelegación del Gobierno.
