El sur de León intenta curarse del olvido

La escasez de médicos en verano o el mal estado de algunas vías como la N-630 entre León y Benavente han sido algunas de las protestas que han marcado el año

T.G.
31/12/2018
 Actualizado a 14/09/2019
Manifestación del día 12 de agosto en Valencia de Don Juan en defensa de la sanidad rural por la merma de consultas en la comarca en verano. | SAÚL ARÉN
Manifestación del día 12 de agosto en Valencia de Don Juan en defensa de la sanidad rural por la merma de consultas en la comarca en verano. | SAÚL ARÉN
El verano en el sur de León es una balsa de aceite, es la temporada en la que se olvida que en algunos pueblos quedan solo cuatro y ya mayores y los teleclubs se ponen a rebosar al caer la tarde. Doblan los habitantes de los municipios gracias al turismo de verano, a esos hijos del pueblo que vuelven para abrir las casas de los abuelos durante el estío. Pero no todo es alegría en esos meses, y menos lo ha sido en el 2018. La afluencia de visitantes al sur de León durante el verano dejó en evidencia un problema que compartió con muchas otras comarcas de la provincia: la escasez de médicos.

Ayuntamientos como Matadeón de los Oteros, Matanza o Fuentes de Carbajal, entre otros muchos, ponían el grito en el cielo reclamando a la Junta de Castilla y León unas soluciones que a día de hoy no han acabado de llegar. Con que el 12 de agosto a mediodía fueron muchos los vecinos de diversos pueblos del sur de León que salieron a la calle en Valencia de Don Juan para reclamar que el sur tenga quien le cure, que no se cierren sus consultorios por falta de médicos cuando alguno de estos coge vacaciones o cae de baja. Pero las cosas no mejoraron y desde la Consejería de Sanidad, no llegaban soluciones. Entonces, de nuevo la gente salió a la calle y de manera más multitudinaria. En esta ocasión fue en Valderas el día 12 de septiembre. Vecinos de las provincias de Zamora, Valladolid y León se unieron manifestando que la sanidad no entiende de fronteras y que si esta falla «es ya la puntilla para que mueran los pueblos». Y que eso no suceda es precisamente uno de los deseos más fuertes en el sur de León para el 2019, año en el que esperan curarse del olvido, ese que las administraciones han tenido con algunas infraestructuras de la comarca como es el caso de la carretera N-630 que une León con Benavente.

Toda ella cuenta con una buena retahíla de baches, pero entre Villamañán y Toral de los Guzmanes estos se convierten en socavones y hacen de la carretera un «camino de cabras». Por ella circulan mal los coches, las bicis, los autobuses, los camiones... y por las redes sociales han corrido como la pólvora durante todo el 2018 los vídeos que así lo demuestran. Como regalo de Navidad, el Estado ha anunciado que con la llegada del buen tiempo en 2019, llegará una solución para el tramo de la N-630 que va de Villamañán a Toral de los Guzmanes, una buena noticia para quienes transitan por esta carretera a diario poniendo a prueba la suspensión de sus vehículos y el aguante de sus neumáticos.

Dicen algunos vecinos en la zona que es que las administraciones tienen olvidado el sur de la provincia leonesa, pero les sobran a ellos las ganas de salir para adelante con movilizaciones o con cualquier otra iniciativa que sea dinamizar el medio rural. Y si no que se lo digan a los vecinos de Villaquejida, que esta Navidad recuperaron la Pastorada que llevaban 33 años sin hacer, siendo esta una de los muchos proyectos que en toda la comarca han salido adelante.

Y al sur del sur, en la localidad de Valderas, no recordarán el 2018 por no haber tenido turbulencias en la Casa Consistorial, que son ya una constante. Dimisiones en el equipo de gobierno y poca actividad municipal han marcado los últimos 365 días en los que también ha habido protestas, las de los vecinos que se pusieron en contra de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) para evitar perder el azud del río Cea que sin previo aviso derribaron perdiendo con ello una parte importante de su patrimonio.

En Valencia de Don Juan, la cabecera de la comarca de la Vega del Esla, ha sido este un año tranquilo en el que su Feria de Febrero repitió éxito como también lo repitió durante el verano la gran afluencia de turistas a las instalaciones del Polideportivo Municipal. Derrumbaron el emblemático edificio de ‘El Guerrilla’ por amenazar a ruina, siguieron cuidando de la indumentaria tradicional con la restauración de valiosas piezas y no faltaron las desavenencias entre el equipo de gobierno y la oposición socialista. Esta ha anunciado ya quién será su candidato de cara a las próximas elecciones del mes de mayo, Juan Pablo Regadera, adelantándose así a un 2019 para el que muchos se preparan con candidaturas para coger el relevo del bastón de mando de los ayuntamientos.

Y hablar del sur de León supone hablar también del sector primario, por el que siguen apostando los jóvenes para asentarse en los pueblos y el que ha dejado una buena cosecha de cereal tras una tranquila campaña de regadío con suficiente agua para regar.
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