Mitad de la población mundial, sostenedoras de vida y, también, líderes en proyectos laborales en el medio rural. La Diputación de León vuelve a entregar este sábado en Sahagún el premio ‘Mujer Rural 2022’, un galardón que reconoce el trabajo emprendedor y la dedicación de las mujeres en la provincia de León. Este año, además, cuenta con una importante novedad y es que se han distinguido dos modalidades, por lo que hay dos personas premiadas.
María del Carmen Alonso-Santocildes ha sido reconocida con el galardón ‘Innovación y emprendimiento en el mundo rural’, un premio que recibe como un aplauso a su "esfuerzo por mantenerme en el medio rural", según explica ella misma. Trabaja como ebanista en el negocio familiar, la Ebanistería Santocildes en Carrizo de la Ribera. Además, acaba de emprender un nuevo negocio en Portilla de Luna, la Casa Rural El Pajar de Portilla.
Matilde Vallejo es de Laguna de Negrillos aunque hace 31 años llegó a Pobladura de Pelayo García. Desde ese momento, y tras haber aprendido las labores con su familia, gestiona una explotación agraria junto a su marido por la que ha pasado diferentes cultivos. Para ella, el premio ‘Tradición y cultura rural’ que recibirá este sábado de manos de la Diputación de León es "muy gratificante, porque yo he apostado siempre por la vida en el pueblo", cuenta.
Ambas reciben este galardón con gratitud y entusiasmo, y las dos sienten que es una manera de reconocer el trabajo que se realiza en el medio rural, algo que ellas ya tienen muy claro desde hace tres décadas.
María del Carmen decidió recoger el testigo familiar cuando su padre dejó el taller, y reconoce que fue un tremendo acto de valentía. "Él no quería que el oficio se perdiera y yo me armé de valor y continué", explica. Ella pasó de ayudante a liderar todo el proyecto, desde el desarrollo de las ideas hasta el montaje final, pasando por los pedidos de materiales, la organización y la fabricación. Esta decisión le hizo descubrir uno de los ‘amores’ de su vida: "Es un trabajo muy satisfactorio, la madera hay que vivirla", cuenta. Aunque también reconoce que es un sector muy masculinizado pero que "vale mucho más la mañana que la fuerza y si estás muy segura de lo que haces, es mucho más fácil", explica la ribereña. María del Carmen, además, ha empleado a otra persona en su taller y obtiene todos los materiales para sus muebles de los productores de la zona, algo que también han querido destacar los organizadores de los premios ‘Mujer Rural 2022’.
Por su parte, Matilde Vallejos decidió dedicarse al campo casi por tradición familiar. Su trabajo ha pasado por plantar diferentes cultivos –que conoce y recuerda al a perfección– a conseguir que sus tierras se conviertan en las principales productoras de soja de la provincia: "Apostamos por este cultivo hace doce años y su resultado es muy positivo", detalla. Matilde Vallejo sabe que "hasta que no vives en el pueblo, no sabes la suerte que tienes", aunque reconoce que la escasez de servicios es uno de sus grandes inconvenientes. Ella anima a todas las mujeres que ahora mismo se plantean emprender en el medio rural a que lo hagan, "porque van a encontrar mucha ayuda, sobre todo si quieren dedicarse a la agricultura", insiste. La Diputación de León ha querido también reconocer en Matilde que haya sido capaz de transmitir a sus descendientes su amor por el medio rural y su ímpetu en la búsqueda de oportunidades en los pueblos. Y es que las dos hijas de Matilde viven y trabajan también en Pobladura de Pelayo García. La madre cuenta orgullosa que «la mayor ha montado su propia peluquería, y está muy contenta», y que su hija pequeña, que estudió Ciencias Ambientales, «ha trabajado aquí en el Ayuntamiento».
Apuesta por las tradiciones
Además de confiar sus proyectos de vida al medio rural, María del Carmen Alonso-Santocildes y Matilde Vallejo también tienen en común su apuesta por la cultura y la tradición en los pequeños pueblos de la provincia.
Matilde explica que le gusta participar activamente en todas las actividades que se organizan en Pobladura de Pelayo García. "Este año hemos recuperado las rondas y también se han hecho jornadas culturales", comenta, y ella se ha unido y se ha implicado en todos los eventos.
Además de participar en la celebración de la Semana Santa, los Antruejos o las romerías, María del Carmen también se encuentra muy vinculada a varios colectivos que defienden la ‘ruralidad’. Por un lado, participa activamente en la Sociedad para el Fomento de la Cultura de Amigos del País de León (Sofcaple), que fueron quienes presentaron su candidatura a estos premios. Pero no solo colabora con esta organización. Ella ha participado contando su experiencia como empresaria y emprendedora en diferentes foros de Amulemer, la Asociación de Mujeres Leonesas del Medio Rural, y también de Fademur, que representa a las mujeres rurales de todo el país.
Ellas son, sin duda, dos ejemplos de esfuerzo, trabajo, y sobre todo mucho amor por la vida en el pueblo.