"El debate sobre la autonomía de León se debe resolver primero en la comunidad"

Entrevista a Meritxell Batet, presidenta del Congreso de los Diputados

Alfonso Martínez
28/06/2023
 Actualizado a 25/07/2023
Meritxell Batet, presidenta del Congreso de los Diputados. | JESÚS F. SALVADORES
Meritxell Batet, presidenta del Congreso de los Diputados. | JESÚS F. SALVADORES

La presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, es la tercera autoridad del Estado y este viernes va a estar en León, en la Basílica de San Isidoro, con motivo de la Conferencia Internacional que servirá para conmemorar el Día del Parlamentarismo e iniciar los actos de la presidencia española de la Unión Europea.

El rey de España será el encargado de inaugurar un evento que contará también con la participación del presidente del Senado, Ander Gil, y de importantes responsables de las instituciones parlamentarias de diferentes países de la Unión Europea. Uno de los objetivos fundamentales de este acto es mostrar al mundo las profundas raíces que el parlamentarismo tiene enterradas en León gracias a la celebración en el año 1188 de las Cortes presididas por el rey Alfonso IX, que están consideradas como el primer ejemplo documentado de participación democrática en la historia.

En esta entrevista, la presidenta del Congreso de los Diputados pone de manifiesto la relevancia de esta Conferencia Internacional y analiza también la situación actual de nuestro sistema democrático y el clima político que se ha vivido en esta legislatura, además de dejar claro que el debate sobre la autonomía de León debe resolverse en el marco de la comunidad antes de abordarse en el ámbito nacional.

– León alberga este viernes los actos del Día Internacional del Parlamentarismo en el inicio de la presidencia española de la Unión Europea. ¿Qué objetivos se persiguen?
– En los últimos años, vivimos una batalla cultural a nivel global entre los valores democráticos y sus amenazas. La idea que vertebra esta Conferencia Internacional de León es debatir precisamente sobre cómo las instituciones parlamentarias pueden contribuir a la defensa de la democracia en ese escenario internacional al que nos enfrentamos. Si los enemigos de la democracia están organizados internacionalmente, que lo están, nosotros, los demócratas, también debemos organizarnos más allá de nuestras fronteras. Por otro lado, nos parecía que el lugar ideal para abrir la dimensión parlamentaria de la presidencia española de la Unión Europea con una reunión al más alto nivel de los presidentes de parlamentos de los países comunitarios era León, cuna histórica del parlamentarismo. Es una manera de unir el presente y el futuro de la democracia con su más primitivo origen, que está en León.

– La conferencia se celebra en la Basílica de San Isidoro, que albergó las Cortes de 1188, que efectivamente están consideradas por la Unesco como primer ejemplo documentado del parlamentarismo en nuestra historia. ¿Qué poso cree que ha quedado del aquel parlamentarismo que se acunó en León respecto al que ahora se practica en el Congreso de los Diputados?
– Son momentos históricos muy distintos y hablamos por tanto de dos tipos de parlamentarismo muy diferentes, el de las Cortes medievales y el de la época moderna. Pero yo sí que diría que hay un hilo conductor, que es la utilización de la palabra para, ejerciendo la representación, defender determinadas posiciones sobre el bien común. Este espíritu sí que ha permanecido a lo largo de los últimos siglos.

– ¿Conocen nuestros parlamentarios actuales todo lo que debieran el espíritu de aquellas Cortes de 1188?
– Creo que la celebración de esta Conferencia Internacional está ayudando muchísimo a dar la difusión que merece a un acontecimiento tan importante como el que ocurrió en León en el año 1188. Una difusión que, al ser una Conferencia Internacional, trasciende nuestras fronteras. Le aseguro que, después de cuatro meses hablando de este tema siempre que he tenido oportunidad, casi todos los presidentes de los parlamentos de la Unión Europea son ya conocedores actualmente de que León es la cuna del parlamentarismo, algo que desconocían previamente.

– Guerras como la de Ucrania, asaltos a instituciones parlamentarias fuera de nuestras fronteras… ¿Cómo valora las amenazas que se ciernen sobre los sistemas democráticos?
– Existe un cierto consenso entre los analistas políticos de que las democracias, a nivel global, están sufriendo un retroceso. Por un lado, tras un período de expansión en el que bastantes países se fueron democratizando, llevamos unos años en los que se han producido fuertes regresiones en algunas de esas recientes democracias, especialmente las que surgieron de la primavera árabe. También se aprecia una actitud de desafío de las autocracias, cuyo ejemplo más cercano y trágico es la agresión de Rusia a Ucrania. Pero lo más llamativo de este período de turbulencias es que la amenaza, en los últimos años, se ha extendido a sistemas democráticos hasta ahora estables, amenaza que, por otra parte, ya no procede del exterior sino del interior de dichos países. Todos tenemos en la cabeza los asaltos a las instituciones en Estados Unidos y Brasil, pero el problema no se circunscribe a países americanos. También las democracias europeas afrontan un deterioro progresivo de las bases sobre las que se asientan, como el mantenimiento de una opinión pública libre, la confianza de los ciudadanos en las instituciones, la capacidad de la política para ofrecer soluciones a los problemas y mantener la esperanza de un futuro mejor. Y todo ello viene acompañado de un aumento de la pulsión autoritaria.

– ¿Cómo pueden contribuir las instituciones parlamentarias a la hora de afrontar desafíos de este tipo?
– Las instituciones parlamentarias son la piedra angular de la democracia. Por respeto a la institución, los representantes parlamentarios deberíamos abstenernos de utilizar las armas del populismo autoritario. No recurrir a la deshumanización del rival político o a la desinformación, no promover el odio hacia el adversario. El respeto por las instituciones democráticas es la base de toda democracia madura. Sólo desde una actitud dialogante, constructiva, cooperativa y leal a la verdad contribuiremos a consolidar el parlamento y, en consecuencia, la democracia.

– ¿Son este tipo de instituciones lo suficientemente cercanas a la ciudadanía a la que representan?
– Creo que se ha hecho un esfuerzo durante los últimos años en este sentido. Las nuevas tecnologías de la comunicación hacen posible un contacto de los representantes con la ciudadanía que antes era más difícil. Todos los diputados y diputadas tienen su agenda llena de reuniones con diferentes colectivos sociales, muchas de ellas ya telemáticas. Y los buzones de correo electrónico repletos de mensajes de ciudadanos anónimos. Por eso, soy consciente de que hacen el máximo esfuerzo por cuidar esa relación directa con la ciudadanía y también de que harían falta más medios materiales y personales para que la misma fuera plena.

– ¿Es el actual el peor clima para el debate político de la toda la etapa democrática o quizá eso mismo lo habrán podido pensar todos los que han ocupado antes su cargo?
– Lo cierto es que siempre ha habido momentos de alta tensión política, pero desde luego el de esta legislatura ha estado entre ellos. Quizás sea una tendencia internacional a la polarización o también que ahora hay un elemento diferenciador que no existía antes: las redes sociales. Pero el caso es que el clima político durante esta legislatura no ha sido bueno y es responsabilidad de todos y todas contribuir a mejorarlo por el futuro de la democracia.

– Ese clima ha estado marcado por una evidente polarización ideológica entre la izquierda y la derecha, pero también por la creciente fuerza de partidos de raíz autonómica e incluso provincial. ¿Cree que los territorios y sus problemas concretos se abordan de manera suficiente en el Congreso de los Diputados?
– Los diputados representan a su circunscripción, que es provincial. Y muchas de sus iniciativas tienen que ver con problemas relacionados con su provincia, o su comunidad autónoma. Este tipo de inquietudes están presentes en todos los grupos parlamentarios, también en los que representan fuerzas nacionales. Pero es que además existen 24 fuerzas políticas representadas en el Congreso de los Diputados, muchas de ellas regionalistas o alguna incluso provincialista, lo que responde a la diversidad de nuestro país. Acudiendo al Diario de Sesiones se puede comprobar que las voces del territorio se dejan sentir en el Congreso de los Diputados. En cualquier caso, en un sistema bicameral en el que hay una segunda cámara, el Senado, es el foro idóneo para este tipo de debates.

– ¿Sería necesario acometer esa reforma del Senado de la que siempre se habla para que realmente sea una cámara de representación territorial?
– Prácticamente todos los especialistas en Derecho Constitucional coinciden en la necesidad de esa reforma. Yo también, puesto que pienso que sería un elemento reforzado de integración de los intereses de los territorios en la gobernanza de lo común.

– En el caso de León, la UPL gobierna varios municipios y es llave en otros muchos, además de en la Diputación con su apuesta por una autonomía propia, algo en lo que coincide también el alcalde socialista de la capital, José Antonio Diez. ¿Ve posible que algún día se pueda abordar en el ámbito nacional este debate a raíz de las diferencias existentes entre los niveles de desarrollo de las dos regiones integradas en Castilla y León?
– Creo que este es un debate que se debe resolver primero a nivel de la comunidad autónoma antes de dar el salto al ámbito nacional. 

– ¿Cuál diría que ha sido su momento más desagradable como presidenta del Congreso de los Diputados?
– Cuando he tenido que intervenir ante comportamientos que degradaban la institucionalidad de la cámara.

– ¿Y el más satisfactorio?
– Los días más satisfactorios siempre son las jornadas de puertas abiertas, en las que puedo compartir directamente con la ciudadanía sus inquietudes y sus anhelos sobre lo que consideran que debería ser su parlamento.

– Ha venido en numerosas ocasiones a León, la última a presentar esta Conferencia Internacional y también a apoyar la candidatura a la reelección del alcalde Diez. ¿Qué es lo que más le cautiva de nuestra ciudad?
– Su majestuosidad arquitectónica, el ambiente que hay en la calle, su gastronomía... Pero, sobre todo, su historia, y el orgullo con el que los leoneses hablan siempre de ella. Por eso, estoy especialmente contenta de haber podido contribuir a que sea un poco más conocida gracias a la celebración de esta conferencia, precisamente el 30 de junio, en el Día Internacional del Parlamentarismo, del que León es cuna.

Lo más leído