El abogado de la acusación tacha de "pasional e impresentable" el crimen de Roberto Larralde

La Audiencia Provincial celebró este viernes la primera vista oral del caso Larralde.  Las defensas de los acusados plantearon, de forma legítima, una serie de cuestiones previas que para el abogado de la acusación, Marcos García Montes, no dejan de ser un «abuso de derecho y mala fe procesal y lo hemos denunciado», ya que, según el letrado, casi todas -basadas en supuestas nuevas pruebas, de nulidad de actuaciones...-están resueltas con anterioridad por la Audiencia, «así que tienen que ser conscientes de que la viabilidad es mínima», señaló. Según el letrado esto tiene que ver con que la defensa «se quiere quitar del medio al fiscal y a la acusación» porque son «personas honestas que van a ir a por todas».

Tras esta vista, la próxima convocatoria, planteada previsiblemente para principios de año, será la del juicio, que empezará con la selección de los miembros del jurado. La sesión se abrirá con el interrogatorio de los acusados y finalmente se valorarán las pruebas e informes finales. El juez tendrá que dictar el auto de hecho justiciable y al finalizar el juicio se dictará el auto del veredicto. Será el momento en el que los nueve hombres y mujeres «sin piedad» seleccionados tendrán que valorar la culpabilidad o no culpabilidad de los siete acusados de un hecho que García califica de «crimen impresentable y pasional perpetrado por una señora que quería matar a su marido».

El abogado de la acusación subrayó que la familia «lo que quiere es que se haga justicia», porque «parece muy triste que te asesinen de esa forma un grupo que además se repartía roles y utilizaba la rama político-militar».

Recordar que la agonía de esta familia viene desde la desaparición del boxeador, el 13 de septiembre de 2014. Su cuerpo fue hallado el 18 de ese mismo mes en las inmediaciones de Santa Olaja de la Ribera. Al día siguiente fueron detenidas cinco personas, entre ellas su ex mujer de la víctima, y posteriormente otras dos por su implicación en el asesinato del boxeador. El Ministerio Fiscal pidió para ellos penas que suman 109 años de cárcel.