Csif pide más medidas disciplinarias para los internos de Villahierro

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (Csif) reclama a la dirección de la prisión leonesa de Villahierro que tome medidas disciplinarias y reglamentarias, para terminar con la "inseguridad" en la que están trabajando los funcionarios, “que sufren continuas situaciones de tensión y riesgo por un buenismo incomprensible que llevan a cabo los responsables del centro, por el que los internos creen que tienen garantizada la impunidad, y que está convirtiendo a los trabajadores en meros peleles”.

Este sindicato asegura que los actuales responsables han cogido el hábito de intervenir en numerosos incidentes o situaciones que se producen con los internos, “con una aparente actitud conciliadora y colaboradora, para luego, al final, tener que ser los propios funcionarios los que tengan que resolver la papeleta de esa gestión ante los internos”.

Para Csif, la dirección del centro penitenciario leonés está poniendo en riesgo la seguridad de los funcionarios y de los propios internos, motivo por el que -junto con otros sindicatos- el viernes día 12 de mayo se va a realizar una concentración ante la Subdelegación del Gobierno de León, en la que se insistirá en el reconocimiento del funcionario como agente de autoridad, y en la necesidad de que la dirección tome medidas disciplinarias y reglamentarias ante ciertos hechos.

La agresión que sufrió este martes un funcionario por un puñetazo de un interno, en el contexto de un incidente “muy grave” que se propició tras aparecer muerto uno de los internos en su cama, en el módulo más conflictivo, el 10, “ha sido la gota que ha colmado el vaso”.

Csif lamenta que la dirección de la prisión, e incluso la delegada del Gobierno de Castilla y León, hayan tratado de quitar importancia a este suceso, después de que la directora, el subdirector de seguridad y el administrador, junto con otros funcionarios, estuvieran retenidos por los internos una hora en el módulo. Los presos rompieron parte del mobiliario durante el motín, e incluso mostraron actitudes amenazantes con objetos contundentes.

Al parecer, explica Csif, los responsables de la cárcel quisieron calmar a los internos y hablar con ellos, ya que culpan de lo ocurrido a la deficiente atención sanitaria que reciben los presos con problemas de adicciones. El sindicato exige que se tomen medidas disciplinarias por el comportamiento de algunos reclusos, “porque si no piensan que pueden hacer lo que quieran, y las consecuencias la sufren los funcionarios”.