En el caso de la provincia de León, la cifra ha pasado de las 5.324 autorizaciones registradas en el año 2007 a las 348 del pasado ejercicio, lo que representa una caída del 93,4%.

Retomando los datos referidos al conjunto de la comunicad, cabe destacar que el desplome durante estos años ha sido constante. Si en 2007 se concedieron 28.290 autorizaciones, al año siguiente descendieron hasta las 27.091, para desplomarse hasta las 12.429 en 2009, el peor año de crisis para la Comunidad. Los permisos retrocedieron aún más en el ejercicio siguiente, con 9.875, y aunque se recuperaron ligeramente en 2011, con 10.383, en 2012, con la llegada del segundo ciclo recesivo del periodo, cayeron a la mitad, con 5.784, para bajar aún más en 2013, con 4.484, y cerrar el ejercicio pasado con 2.237, bajo mínimos, informa Ical.
Es preciso señalar finalmente que las cifras que aporta el departamento que dirige Fátima Báñez reflejan que de los 2.237 permisos a trabajadores extranjeros contabilizados el año pasado en Castilla y León, la mayor parte, 2.101, fueron por cuenta ajena, frente a los 105 por cuenta propia. Cabe destacar también que las cifras desglosadas por sexos establecen que el mayor número de autorizaciones correspondió a mujeres, 1.283, frente a las 954 para hombres.