Boñar cumple su deuda con 13 juntas vecinales

El equipo de gobierno presentará en el pleno ordinario de este jueves el acuerdo para la restitución de varios pueblos como entidades locales

04/10/2023
 Actualizado a 04/10/2023
Localidad de Voznuevo, primera en movilizarse para recuperar su junta vecinal en 1993. | ALFREDO HURTADO
Localidad de Voznuevo, primera en movilizarse para recuperar su junta vecinal en 1993. | ALFREDO HURTADO

El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Boñar presentará en el pleno ordinario de mañana jueves el acuerdo para la restitución de las juntas vecinales de Adrados, Barrio de las Ollas, Las Bodas, Cerecedo, Colle, Felechas, Grandoso, Llama de Colle, Oville, Veneros, Valdecastillo, Vozmediano y Voznuevo.

El Ayuntamiento de Boñar cuenta con 19 pueblos, incluido Boñar, diferenciados entre sí y con sus territorios claramente definidos. Tres de estos pueblos están constituidos como entidad local menor: Orones, Rucayo y Valdehuesa. Estas tres localidades, como se viene haciendo históricamente, se gestionan como juntas vecinales. Desde la desaparición del Ayuntamiento de Vegamián, al que pertenecían, pasaron a formar parte del Ayuntamiento de Boñar sin perder su rango de entidad local menor.

Su estatus de entidad local menor les fue retirado en 1967 por decreto y desde 1993 luchan por recuperarlo

La deuda histórica del Ayuntamiento de Boñar con los pueblos pertenecientes el municipio se remonta al año 1967, fecha en la que les fue retirado mediante decreto su estatus de entidad local menor, cuya gestión habían desempeñado eficazmente hasta la fecha. La lucha de estos pueblos para recuperar sus juntas vecinales comienza en 1993, fecha en la que los vecinos de Voznuevo inician los trámites para que el pueblo sea de nuevo reconocido como entidad local menor.

El primer pueblo en iniciar los trámites para volver a ser reconocido como junta vecinal fue Voznuevo

En noviembre de 1996 los pueblos de Barrio de las Ollas, Las Bodas, Colle, Felechas, Llama de Colle, Oville, Veneros y Vozmediano inician un proceso similar con el mismo objetivo de restitución de sus juntas vecinales. A pesar del apoyo de grupos políticos de la provincia a estos pueblos, el obstáculo que impidió que se devolvieran los derechos que claramente les pertenecían fue el propio Ayuntamiento de Boñar. En la actualidad, todos estos pueblos mantienen las caracteristicas presentadas en su momento, cumpliendo las normativas y contando con el apoyo del Ayuntamiento.

Según el equipo de gobierno, devolver a estos pueblos su autonomía y sus legítimos derechos ya se ha postpuesto demasiado tiempo y ha llegado el momento de que recuperen su propio autogobierno, que tuvieron durante siglos. Hasta un catedrático de Historia moderna de la ULE, como Laureano M. Rubio, manifestó en su momento que «ni la Junta de Castilla y León ni el Ayuntamiento tiene capacidad moral ni derecho, que no pise el derecho histórico de estos pueblos, a negarle la recuperacion de un patrimonio social, económico y cultural bajo criterios tan peregrinos como el de que son pocos vecinos o el de que no tienen recursos que gestionar».

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