Actualmente, según los datos facilitados por CSIF a este periódico, en la provincia de León hay 56 secciones bilingües y dos secciones lingüísticas para que los alumnos avancen en el manejo de una segunda lengua. Uno de estos centros educativos realiza este tipo de formación en francés (Padre Manjón en Armunia) y otro en alemán (San Claudio en León), mientras que el resto utilizan el inglés.
Según denuncian desde el sindicato, la actual apuesta de la Junta de Castilla y León por el bilingüismo en las aulas «para lo que sirve realmente es para que los alumnos pierdan contenidos en español». «Lo que hicieron fue generalizarlo, especialmente aquí en la provincia de León, sin comprobar los resultados o probar el sistema primero con unos pocos centros», valora el responsable de educación de CSIF en la provincia, Javier Fernández.
La mayoría de estos planes se basan en impartir una determinada asignatura en otro idioma. Las más habituales en Educación Primaria son ‘Science’ o ‘Art’, en la que tradicionales materias como Conocimiento del Medio o Plástica se enseñan en lengua inglesa. En Primaria también es frecuente que se impartan en inglés disciplinas como Música o Educación Física, mientras que en la ESO estos programas se realizan en enseñanzas como Historia, Geografía o Biología. «Es mejor hacerlo en unas materias que en otras. Por ejemplo, perjudica menos en Educación Física que en Biología», comenta Fernández.
No obstante, el principal inconveniente surge en que muchos alumnos «arrastran su problema con el idioma a otras asignaturas» y en inglés «aprenden menos». «¿Qué Ciencias Naturales o Biología van a aprender en inglés? No aprenden ni siquiera más inglés. Aunque los profesores cada vez están más formados para impartirlo, al ser en otra lengua el contenido se resiente», plantean desde el CSIF.
Sin posibilidad de elección
Para este sindicato, la Administración «no dio opción de elegir» y hubo centros que fueron nombrados «de oficio» como bilingües. «Llegó a haber en León tantos centros bilingües como en Salamanca y en Valladolid juntos», asegura Javier Fernández.
Las primeras secciones bilingües que hubo en la provincia se pusieron en marcha en el curso 2006/2007 en el Ceip De Valles (Boñar), el Ceip Teleno (La Bañeza) y los leoneses Las Anejas y La Granja. «Los privados La Asunción y La Anunciata también comenzaron ese primer año», añade el responsable de CSIF en materia educativa.
«Mejor» las secciones lingüísticas
Para este sindicato «no tiene nada que ver» el modelo de sección bilingüe con el de lingüística, porque este segundo «funciona mucho mejor». Según explica Javier Fernández, estos centros cuentan con profesores nativos que «apoyan más al alumno» y se basan, en muchos casos, en programas como ‘British Council’ del Ministerio de Educación.
En la provincia, trabajan como sección lingüística el Ceip Quevedo y el astorgano Santa Marta. Cuando sus alumnos acceden a Secundaria, continúan respectivamente con este programa para aprender inglés en los institutos de Eras de Renueva y de Astorga.
"Lo más conveniente sería mezclar las asignaturas de Inglés, Science y Art"
Una de las profesoras que imparten en la provincia de León la asignatura ‘Science’ es Sara Martín. Según asegura a este periódico, enseñar en el aula materias como esta, que explica contenidos científicos en inglés, «es positivo para el alumno si se da bien».
Esta docente leonesa reconoce que existe «el conflicto de que no aprendan ni en español ni en inglés» y que muchos niños y niñas «arrastran sus problemas en inglés» a estas asignaturas. «La mejor manera de trabajar estas asignaturas bilingües es con ‘Clic content and language integrated learning’», señala Sara Martín.
Esta profesora de Primaria plantea que «lo más conveniente» para el aprendizaje del alumno es que se «mezcle» el programa de Inglés con ‘Science’ o ‘Art’. «Por ejemplo, con el aparato digestivo, se puede dar la gramática en Inglés, el contenido en ‘Science’ y que hagan una maqueta para que manipulen todo lo que han aprendido en ‘Art’», plantea asegurando que en la evaluación «no entramos en si son buenos o malos en inglés» puesto que las cuestiones gramaticales se explican en la otra asignatura.
Por lo tanto, prima el contenido y, puesto que muchos alumnos no saben explicar la lección en español después de los exámenes, Sara Martín opta por hacer resúmenes en español. Una vez entendido el vocabulario y «lo básico» del tema científico que se esté impartiendo, en su aula desarrollan el programa oficial en lengua inglesa.