Baldo López acampará frente a la Junta de Castilla y León

El ganadero de Tejedo del Sil afirma sentirse "engañado" y reivindicará así sus derechos

J. A.
16/04/2023
 Actualizado a 16/04/2023
Baldo, a su llegada el viernes a León tras la marcha desde su pueblo. | SAÚL ARÉN
Baldo, a su llegada el viernes a León tras la marcha desde su pueblo. | SAÚL ARÉN
El ganadero de Tejedo del Sil Baldo López, que este viernes llegaba a León finalizando una marcha desde su pueblo para reivindicar los derechos de los pastos que asegura se le niegan, acampará desde este lunes frente a la delegación de la Junta de Castilla y León para mantener su protesta.

El viernes López llegaba a la sede del organismo autonómico acompañado de una de sus vacas y de su pareja, siendo recibido por el  jefe del servicio territorial de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Fidentino Reyero. López agradece "su amabilidad, talante y aportaciones", aunque asegura que la reunión "no fue fructífera" y que su abogada "no está de acuerdo con lo que se transmitió, cree que se me engañó y mientras ella defiende mis intereses yo los reivindicaré con la acampada".

Además, responde el ganadero al comunicado del presidente de la Junta Vecinal de Tejedo del Sil, David Verano, que desmintió todas sus acusaciones asegurando que eran "radicalmente falsas" y además amenazaba con denunciar no solo al ganadero, sino a los medios de comunicación que han dado cobertura a su propuesta. "Sus declaraciones me dejan perplejo y le definen como persona". Verano definía a la pareja de Baldo como su "socio", algo a lo que responde afirmando que "tenía perfectamente claro su inquina hacia mí y a mi pareja, no socio, pareja, querer cercenar la libertad de los medios de comunicación con amenazas judiciales es muy esclarecedor". Así, asegura que "la Junta Vecinal que tome las acciones legales que estime como ya ha hecho en otras ocasiones, eso sí, tirando con pólvora ajena, pues los abogados se pagan con fondos del pueblo".

Sobre el tema de fondo, los pastos que se le niegan en una subasta a la que la Junta Vecinal asegura que no se ha presentado desde 2021, afirma Baldo "tener derecho a unas hectáreas que vengo solicitando, pagando al MUP de Tejedo de Sil en 2021 y 2022 sin contestación, este año lo han hecho por la presión de los medios". Señala que "la subasta es posterior a la adjudicación de propios, con lo cual puede haber sido ilegal, la intención de esta Junta Vecinal ha sido siempre que me vaya y que mi explotación quiebre".

Igualmente, otra de las denuncias pasa por la negación de las hectáreas en el Monte Privado de Camposagrao "del que soy socio por herencia de mis padres, un monte cuyos estatutos dicen que se compra para aprovechamiento único de pastos y leña". Explica que "el año pasado el presidente de la Junta Vecinal le envía una carta a la Junta de Castilla y León para que no incluyan las hectáreas de sus dos parcelas con el fin de que yo no las pueda incluir en la PAC, pues soy el único ganadero de Tejedo socio del monte y por tanto con derecho a ellas". Según el presidente "hay un plan dasocrático en el monte y no es compatible con los pastos", asegurando que la "Junta de Castilla y León aún no nos ha hecho llegar el plan a pesar de haberlo solicitado, si prohibiera el pasto estaría viciado desde su inicio pues no puede restringir los usos para los que fue comprado". Afirma que "he solicitado esos pastos en 2021, 2022 y 2023 pagando, pero no me han contestado", acusando al pedáneo y presidente del monte de "disfrutar cazando con sus adláteres, no sé si pagan por ello, en sus estatutos no se contempla la caza, pero la Junta lo permite". Así mismo, acusa a la sociedad civil de Camposagrao "de no convocar las juntas que la ley obliga, nada de sus cuentas en su coto particular, no sabemos nada".

Lamenta Baldo que "desgraciadamente me seguirá tocando hacer ruido no solo para que se me escuche, necesito soluciones y respeto, sino que también sirva para que si algún cacique ve esta denuncia se frene y no cometa las mismas injusticas que conmigo se cometen".

Así mismo, reafirma una vez más el ganadero que "sí hay discriminación risas, insultos, gestos obscenos por homofobia y un pueblo mudo que entre ellos se despellejan y cuentan unos de otros sus inmundicias, pero ahora yo soy la pieza a abatir".
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