Precisamente estas son las culpables de la desaparición de gran parte de los mamíferos salvajes. Según WWF, «autovías, autopistas y trenes de alta velocidad han partido la naturaleza aislando a las especies y alterando, de forma grave, los procesos naturales». No solo la vías de transporte son responsables de la destrucción de los hábitats. La organización alerta de los efectos de la agricultura intensiva y una organización territorial incorrecta. «Crean desiertos de biodiversidad y también han contribuido al aislamiento y la fragmentación de los espacios naturales», asegura WWF en su estudio.
Según WWF las autopistas son las culpables de gran parte de la desaparición de los mamíferos de la zona
La conversión de las zonas salvajes en pequeñas ‘islas’ repecute en la extinción de algunas especies y la pérdida de la biodiversidad. Muchos mamíferos salvajes no pueden desplazarse en busca de nuevo alimento. La fauna también es la encargada de transportar semillas de un hábitat a otro, la incapacidad de moverse de una punta a otra de la Península Ibérica altera profundamente procesos naturales como este. La organización por el medioambiente también alerta de la figura de los ‘exiliados climáticos’, animales que se enfrentan a la destrucción de su hábitat por el cambio climático y que, sin estos caminos naturales, no pueden buscar nuevos hogares. Para las especies amenazadas, como el lince o el oso ibérico, la falta de conectividad favorece su aislamiento, impidiendo que el número de ejemplares crezca.
Casi el 30% del territorio español se encuentra protegido. Sin embargo, estas zonas se encuentran aisladas entre sí. Un oso, un corzo o un lobo no puede desplazarse desde Picos de Europa hasta la Sierra de Guadarrama sin poner en riesgo su vida. El informe de WWF, elaborado en colaboración con la Universidad Politécnica de Madrid, propone no solo la preservación de estos espacios, sino la restauración de los puntos críticos y la reconexión entre ellos.
Una autopista sin peajes
Las zonas que propone WWF pertenecen a la Red Natura 2000, un conjunto de áreas de conservación de la biodiversidad en la Unión Europea creada en 1992. «La superficie forestal en España abarca el 55% del territorio y los espacios seleccionados como núcleo representan más del 90% de la superficie total de la Red Natura 2000 española», señala la organización en su informe. También se han tenido en cuenta las masas de agua, los corredores ecológicos de mayor prioridad se han situado en los márgenes de los ríos y no suelen localizarse en paisajes agrarios. Además, se ha considerado que los caminos que los mamíferos puedan emplear sean ‘caminos de coste mínimo’, es decir, que presenten menor dificultad para su recorrido.Con esta ‘autopista salvaje’ se evitaría la muerte de mucho mamíferos. Los atropellos se han convertido en la principal causa de muerte del lince ibérico, más de 121 atropellos en la última década.