La liberación de los permisos de pesca reservados para la celebración de la Semana Internacional de la Trucha han sido liberados, levantando la sospecha de aficionados y pescadores de la desaparición del evento, al menos en lo que se refiere a su formato tradicional y fechas. José Luis Garcia González, investigador y escritor sobre pesca que es además vocal del Consejo Territorial de Pesca de León, asegura que "desde Valladolid la idea es realizar una especie de competición de pesca y algún acto de nueva creación en el mes de octubre, nada que ver con la 'Semana'".
García ha emitido una carta denunciando esta situación que se reproduce a continuación:
¿Adiós a la Semana Internacional de la Trucha?
Suma y sigue. Seguramente estas líneas van a ser escritas del tirón, pues cada palabra va a salir directamente del corazón al teclado.
Dicen en mi tierra “cuando el río suena agua lleva”. Me llegan noticias de que la Semana Internacional de la Trucha de León va a desaparecer tal y como la conocemos hasta ahora. Con ella desaparecería también parte de nuestra historia, nuestra cultura y nuestro futuro en cuestión de pesca y promoción del turismo en la provincia de León.
La Semana Internacional de la Trucha nació en León en 1966, hace ya 57 años, 55 ediciones y 2 que no pudieron celebrarse con motivo de las limitaciones ocasionadas por la pandemia, los años 2020 y 2021. Es por tanto uno de los eventos de pesca más antiguos y de mayor trayectoria del mundo. Sin duda, el más antiguo tanto en España como en Europa.
En esta semana dedicada a la pesca, la provincia de León ha abierto el balcón de sus excelencias a quienes vienen a pescar y también a los que no pescan. Quien participa busca el disfrute de los ríos, la naturaleza, las truchas y los buenos y viejos amigos. Quien no pesca, se puede recrear con actividades y gastronomía que esos días acompañan la exaltación de la riqueza piscícola y natural de nuestra provincia. Para todos los gustos.
Grandes pregoneros han tenido su lugar en la Semana Internacional de la Trucha, así como conferenciantes de peso y un montón de actividades que desde hace ya más de medio siglo han enriquecido y fomentado la cultura de la pesca en León y en España. Bien es cierto que, en los últimos años la Semana se ha mantenido más a base de trabajo e ilusión que de recursos, gracias en mayor medida a la disposición y esfuerzo del Servicio Territorial de Medio Ambiente de León, desde aquí una vez más mi agradecimiento. El tema de la escasa provisión de recursos para este evento daría sin duda pie a otras cuantas líneas.
La Semana Internacional de la trucha es más un concurso que una competición, que, aunque lo pueda parecer, no es lo mismo. La Rae dice que el concurso es “una prueba entre varios candidatos para conseguir un premio, sin embargo, define competición como “competencia o rivalidad de quienes disputan una misma cosa o la pretenden”, que no es lo mismo.
El Sr. Consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, leonés por cierto, volvió a anunciar en el pasado Pregón su intención de impulsar la “Semana”, como la conocemos los pescadores. Sin duda eran buenas noticias, siempre y cuando se tuviese la consideración de respetar su esencia, pues de no ser así, ese “impulso” podría hacer que acabase siendo un evento meramente competitivo más, otro.
Entiendo que, si hasta ahora se ha podido hacer con pocos recursos, incrementándolos, y sabiendo gestionarlos, sin duda la “Semana” volverá a ser lo que fue, pues para hacerlo solo habrá que contar con quienes la sacaron adelante en los tiempos de vacas flacas, y han demostrado su interés y cariño hacia ella. No podemos reinventar algo que lleva inventado 60 años, y mejorar no supone, como estamos tan acostumbrados, derribar y construir de nuevo.
Desde León para el mundo, eso es La Semana Internacional de la Trucha.
Pues bien, la noticia es otra. Nuestros políticos, de manera completamente unilateral, han decidido acabar con todo esto. Y no me digan que se traslada a otras fechas en las que las truchas salen a comer a los prados, que se pretende actualizar e innovar el formato con una fórmula magistral mejor que la de la Coca Cola, que se va a pregonar por San Pedro, que … No me cuenten milongas. Organicen lo que organicen, y lo organice quien lo organice, nunca será nuestra “Semana”, será simplemente un nuevo “invento”.
Parece que a nuestros políticos de Valladolid no les gusta que León destaque en algo, ya que ninguna provincia de nuestra Comunidad puede competir en la cantidad de ríos que tiene León (aunque nuestra agua la administren también), ni con la cantidad de truchas autóctonas que tenemos, ni con una Semana Internacional que ha sido y es un referente para todo pescador.
Con esta polémica medida van a acabar con una etapa importante en la historia de León, porque como dije antes, la Semana Internacional de la Trucha, es para toda la ciudadanía, pescadores o no. Es un símbolo de la ciudad, así lo demuestran los carteles que se encuentran a la entrada de León. Pero los intereses de unos pocos, van a destruir el Patrimonio de muchos.
¿A quién pretende satisfacer una decisión de este calado?; ¿a los pescadores que buscan todas aquellas cosas que enunciaba en el cuarto párrafo de estas líneas?, seguro que no, ¿a otros que tan solo buscan la mera competitividad o la trucha más grande?, que también los hay, ¿o es simplemente una cuestión “política” ?, de ser así, apaga y vámonos.
Y todo ello en el Cuarto Centenario del Manuscrito de Astorga. ¿Será otra casualidad?, parece más bien alevosía, pues el Manuscrito de Astorga es otro de nuestros referentes de pesca, situándonos a nivel internacional como uno de los documentos más antiguos a nivel mundial donde se recogen recetas para hacer moscas de pesca. ¿Qué mejor manera de invisibilizar este hecho tan importante que acabando con la Semana Internacional de la Trucha, donde seguramente este antiguo Tratado debería de ser protagonista? Otro desprecio más a la cultura y tradición de León.
¡Señor!, ¡Señores!
PD: Hago hincapié en los interrogantes que componen la frase que titula estas líneas. Representan la dignidad, la sensatez y la coherencia.