Adiós a Almacenes Catalanes

El fin de la prórroga de la renta antigua cerrará en los próximos días uno de los establecimientos con más historia de la ciudad, Almacenes Catalanes, en pleno Barrio Húmedo. Una tienda de prendas básicas y uniformes laborales que nació hace ya 62 años y que ha sido testigo de la historia y la evolución de la ciudad.

En 1995, cuando la Ley Boyer fijó una prórroga de 20 años para los locales con estas rentas, "la fecha parecía muy lejana, pero llegó", lamenta Ángel Rueda, su fundador y una de las personas que, pese a haber dejado el testigo del negocio hace años a su hijo, no se ha desvinculado.

El fin de la renta antigua es el principal detonante de este cierre, Ángel Rueda no se planteó seguir con el negocio en otro local de la ciudad, el precio actual de los alquileres no se lo permitiría. Así, el fin de la historia de Almacenes Catalanes dejará casi huérfano el sector de los uniformes laborales en León, y, es que, este establecimiento ha vestido a lo largo de su dilatada historia a generaciones de camareros, de personal sanitario o multitud de profesionales con prendas de calidad, requisito imprescindible que se extendía también al resto de artículos que los leoneses pudieron encontrar en este establecimiento que ahora dice adiós.

Un negocio familiar y cercano, en el que los clientes dejaron de serlo para convertirse en amigos. "Las franquicias, que han pisado al comercio tradicional, no ofrecen esta cercanía", recuerda Ángel Rueda, con la convicción de haber servido a generaciones de leonesas las mejores calidades de cada momento y de haber evolucionado a la par que la ciudad.

Pese a su próxima desaparición, Almacenes Catalanes quedará en la memoria de cientos de leoneses y en la historia de la ciudad.