A Roma en el año de la Misericordia

Una delegación de feligreses leoneses encabezada por el obispo de León, Julián López, viajó durante la pasada semana a Roma en una peregrinación diocesana con motivo del Año Jubilar de la Misericordia. Unos 60 fieles, con representación también de la Diócesis de Astorga, y más de una veintena de seminaristas, acompañados por el prelado leonés, pusieron rumbo a la capital italiana el pasado 27 de marzo en un viaje en que el participaron en diferentes eucaristías y visitaron las grandes basílicas romanas: San Juan de Letrán, Santa María La Mayor, San Pablo o San Pedro, en el Vaticano, además de catacumbas y otros lugares de Roma, que está «llena de arte», celebró el obispo.

La recepción con el Papa fue el momento cumbre de la peregrinación, le he encontrado verdaderamente gozoso La recepción con el Papa fue el momento cumbre de la peregrinación, le he encontrado verdaderamente gozoso La peregrinación, que se alargó durante casi seis jornadas, tuvo su momento culmen, cuando la delegación acudió a la audiencia ofrecida por el Papa Francisco en la plaza de San Pedro del Vaticano, ante miles de personas. Tras madrugar para poder pasar los exhaustivos controles de seguridad que se realizan para acceder a este tipo de eventos, sobre las 9:30 de la mañana Jorge Mario Bergoglio recorrió en el ‘Papa móvil’ la plaza entre la gente y los leoneses que acudieron «pudieron verle muy de cerca». Además, doce seminaristas pudieron presenciar el acto en la parte superior junto a la plataforma en la que se sitúa el Papa para pronunciar su discurso, que estuvo muy centrado en la misericordia y el perdón y se dirigió en español y de forma personas a las diferentes delegaciones de fieles que se encontraban en la plaza. Al finalizar sus palabras, el pontífice saludó a los obispos presentes, entre ellos Julián López, al que le preguntó por su Diócesis. El prelado leonés le confesó que está formada, en buena medida, «por personas mayores», para las que pidió una «bendición especial». Además, pudo mostrarle a algunos de los seminaristas que se situaron en las primeras filas, «momento cumbre» de la peregrinación para el propio Julián López, que no era la primera vez que se encontraba con el Papa en el Vaticano. «Lo he encontrado verdaderamente gozoso», afirmó el obispo, «sin duda» por la fiesta de Pascua, aunque «sabíamos que estaba muy afectado por las muertes en los atentados de Pakistán», confiesa. La peregrinación finalizó el primer día de abril con el regreso a León.