El Gobierno de España autorizó sobre este miércoles la intervención de la UME, equipados con maquinaria y el material necesario, en la provincia de León para luchar contra el temporal. La Junta de Castilla y León solicito la colaboración de este destacamento que se unió a los medios de las administraciones territoriales, Estado, Comunidad Autónoma, Diputación Provincial, ayuntamientos y otras entidades menores, según un comunicado de la Delegación del Gobierno en la Comunidad.
Asimismo, lleva activado desde este miércoles por la tarde el envío de efectivos y material de la UME al norte de la provincia de Palencia, que se vio “muy afectada” por la nieve. Además, activó el Plan Territorial de Protección Civil de Castilla y León (Plancal), con el nivel de gravedad 1, debido a los problemas que está causando el temporal de frío polar.
La UME de León también en Palencia
Un grupo de 70 efectivos del quinto batallón de la Unidad Militar de Emergencias (UME), con base en León, y otros medios de la Guardia Civil ha estado trabajando durante toda la noche para retirar la nieve que se acumula sobre la calzada de la Autovía de la Meseta (A-67), entre Palencia y Cantabria. La vía se encuentra “bloqueada” en el tramo correspondiente al puerto de Pozazal, en la comunidad vecina, según fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Palencia.
Asimismo, desde última hora de ayer el Gobierno no tiene constancia de que haya vehículos atrapados en la red de carreteras de titularidad estatal. En total, se evacuó a más de 50 personas que se vieron atrapadas en sus vehículos en la autovía al no poder circular por las intensas precipitaciones de nieve. Todas ellas han pasado la noche en los colegios de San Gregorio y Castilla y León de Aguilar de Campoo, así como en la Escuela de Música.
La UME y la Junta envío ropa y víveres para atender a las personas afectadas que habían sido rescatadas. También, se buscó alojamiento para otras personas en Reinosa y Mataporquera. Este jueves, los efectivos de la unidad militar siguen trabajando con medios técnicos y humanos para restablecer la normalidad cuanto antes, si bien las continuas precipitaciones y los coches, que se quedaron atrapados, complican la limpieza de la calzada.