Atrás queda aquella fecha en la que la Junta fijo como fiesta oficial el 23 de Abril de cada año, día muy agradecido por la tierra vecina de Asturias la cual acogía con todo cariño a la cantidad de leoneses que aprovechaban esta fecha para acercarse a la querida tierra asturiana. La inexistente identificación con la mencionada fecha queda patente en nuestra provincia, aunque todavía hoy, desde el mencionado órgano autonómico siguen intentando amansar a los díscolos acercando la festividad a cada provincia por ver si de esta forma bajamos la cerviz y entramos en el redil.
A tal efecto, e ignorando lo que en León se siente cada vez que se menciona a León como: «esa provincia castellana» en los diferentes medios de comunicación, desconociendo el sentimiento existente en este sentido, que casi es inexistente. Yo, cuando me desperté con la noticia, creí que era una broma que León hubiera sido el lugar elegido para celebrar dicha conmemoración este año. Pero ¡a quien se le ocurre mencionar la soga en casa del ahorcado! Sin soliviantar a la mayoría de la población que nada siente al mentar esa fecha, salvo para agradecer un día festivo venga de donde venga. Que conste que aquí nada se tiene en contra de dicha celebración en Villalar honrando a aquellos tres comuneros: Padilla, Bravo y Maldonado que tuvieron la osadía, entonces, de enfrentarse al poder real pagándolo con sus cabezas, nunca mejor dicho. Pero lo que trato de poner de manifiesto, a tenor de lo que palpo entre los leoneses, es la nula identificación que en nuestra provincia existe con la citada fecha.
Recuerdo ver a políticos relevantes leoneses con pañuelo al cuello, por aquello de que, como en las películas en los comienzos de la apertura en la censura, había desnudos y las actrices se justificaban diciendo aquello de que estos tenían lugar porque lo «exigía guión». Este año los políticos leoneses (no todos) volverán a sonreír con los dientes apretados, esperando cuando finaliza dicha celebración para volver a casa con el deber cumplido de estar presente allí donde están los demás, no sea que se nos escape algún futuro voto o sea reprendido por los órganos superiores del partido que son los que luego cortan el bacalao.
Aquí tendría sentido el dicho del gran humorista y actor español José Mota diciendo «su hay que ir, se va, pero ir pa na es tontería». Como decidido rechazo a la celebración en León del mentado día, el cartel de la Marquetería Rama Viva, con el siguiente texto «Abrimos el 23 de abril “porque la fiesta de los comuneros no es nada nuestro». También el mismo día tendrá lugar una manifestación leonesista a las 11:30 reivindicando una autonomía propia para la Región Leonesa desde Guzmán el Bueno hasta el parque de los ‘Pendones’ con parada previa, y pitada, en San Marcos.
No hay peor ciego que el que no quiere ver. Más claro el agua.