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León y el prerrománico leonés

02/11/2023
 Actualizado a 02/11/2023
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El conjunto patrimonial leonés entronca con un pasado peculiar, diferente al de otras regiones. Por eso, negar la existencia diferenciada de lo leonés implica la ignorancia de su pasado y, por extensión, de sus producciones artísticas. Algunas de las más singulares crecieron en la etapa entre el año 900 y el 1100 aproximadamente. Ese periodo comienza con el nacimiento de un reino ligado a un territorio mestizo: la Terra de Foras.

En aquel espacio al sur de la Cordillera Cantábrica y al este del Cebreiro se mezclaba gente del norte –cristianos de Asturias acostumbrados al orden regio–, lugareños –que habían vivido con pocas ataduras de los poderes señoriales e inseguridad–, gente del sur –que traía un nivel cultural superior y la floreciente tradición andalusí–, judíos –que formaban grupos en las zonas recién estructuradas, en lugares con mayores posibilidades comerciales–, gallegos –que venían de un lugar con fuerte presión señorial–, o gentes del este –de la frontera andalusí. acostumbrados al servicio militar–. 

De aquellos tiempos quedaron topónimos como Toldanos (toledanos), Castellanos, Gallegos del Pan, Asturianos o Bercianos del Páramo, que hacen referencia a la procedencia de sus habitantes. También numerosos pueblos con nombres de raíz árabe como Almázcara, Almuzara, Benamariel, Algadefe, Mazarife, Almanza o Benavides. En ese magma social sobre el que se organiza un reino se produce el cambio nominal de la Terra de Foras a León, haciendo extensivo el nombre de la ciudad, al igual que se produciría en el Territorio Bergidense (el dependiente de la ciudad de Bergidum) que terminaría adoptando el nombre de Bergido.

En ese espacio, en ese ambiente social, en esa coyuntura política se elabora una producción artística arquitectónica, orfebre y bibliográfica caracterizada. Lo llamamos Prerrománico Leonés. Es un arte coetáneo con otros prerrománicos y también andalusíes, un conjunto extraordinario que diferencia a la Península Ibérica de cualquier otro lugar de Europa y del Mediterráneo. Sin embargo, este conjunto patrimonial no ha recibido la atención suficiente. La prueba es lo poco que sabemos de ese periodo.

Hace unos días se presentó en León AIPRELE (Asociación Ibérica de Amigos del Prerrománico del Reino de León) para poner cuanto pueda de su parte en la conservación, divulgación y puesta en valor de las producciones que nacieron en el ámbito del Reino de León antes de la llegada, casi invasión, de los monjes cluniacenses y del papado de Roma. Se trata de edificios, libros, documentos, orfebrería, etc con mil años de antigüedad. Su conocimiento completará el de los orígenes de Europa.

 

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