Interés general y cargo

Hace unos días el pleno del Ayuntamiento de Cistierna se pronunció en contra de una moción por la Autonomía de León. El voto negativo, después de hacerse públicos dos documentos técnicos que aconsejan todo lo contrario, es injustificable.

El primero está elaborado por Proyecto León. Es un diagnóstico de la evolución de la Región Leonesa durante el periodo autonómico. Se toman los tres pilares del desarrollo: renta per cápita, evolución demográfica y evolución del empleo. Los datos proceden de fuentes oficiales: Contabilidad Nacional de España, Seguridad Social e Instituto Nacional de Estadística. La conclusión del estudio de Proyecto León es que la leonesa es la peor de España entre las regiones y autonomías por la evolución de la prosperidad durante la etapa autonómica.

El segundo informe técnico se realizó por Iniciativa Autonómica Leonesa. Basándose en el sistema de financiación de las comunidades autónomas, establecido por ley orgánica, se concluye que la autonomía leonesa es muy favorable. Además, se estima que faltan cada año unos 500 millones de euros de gasto autonómico en la provincia de León.

¿Se imaginan lo que sería para los pedidos a las empresas, para el comercio minorista, para las juntas vecinales y pequeños ayuntamientos, para los jóvenes que se incorporan al mercado laboral, para la atención sanitaria, para cubrir puestos de maestros vacantes, para el mantenimiento de carreteras disponer de 500 millones de euros más circulando por la provincia cada año? ¿Sería la capacidad de gasto la misma? ¿Habría problemas para ampliar las UCI de los hospitales? ¿Quedaría casi sin radioterapia El Bierzo?

Nicanor Sen, alcalde de Cistierna, ha decido que los leoneses renunciemos a todo eso. Impuso el voto negativo en su grupo municipal. Asalariado de la Diputación de León, ha hecho lo que le mandaron, caiga quien caiga. La prosperidad de un pueblo a cambio de un salario. Esa es la ejemplaridad del cargo público. La palabra del personaje queda retratada por sus declaraciones en un periódico provincial en 2017: “la situación económica y demográfica de la Región Leonesa es muy delicada. (…) El momento para abandonar la autonomía debería acordarse mediante un amplio consenso, se lo dice un leonesista convencido”. Pura contradicción.

Cistierna tenía en 2017 3243 habitantes, según el INE. En el censo de 2020 quedaban 3090. Perder casi un 5% de la población en solo 3 años no le parece a su alcalde de gravedad suficiente para pedir una solución drástica, global, definitiva. Esos son sus principios, pero cuáles ¿los de 2017 o los de la semana pasada? ¿Será capaz de enmendar este dislate?