Irán, Emiratos Árabes y China, vías de salida para los productos bercianos

Tras dos años de trabajo en solitario intentando abrir puertas a inversiones del exterior, el concejal de Camponaraya del PP Javier Folgueral cifra el éxito de sus contactos en un 45%

Mar Iglesias
19/02/2018
 Actualizado a 15/09/2019
Folgueral y el concejal de Comercio de Ponferrada presentando sus contactos con Emiratos Árabes. | MAR IGLESIAS
Folgueral y el concejal de Comercio de Ponferrada presentando sus contactos con Emiratos Árabes. | MAR IGLESIAS
Paseos por las embajadas con un proyecto bajo el brazo, el de conseguir inversiones para que la comarca berciana repunte, ha sido el camino que a lo largo de los dos últimos años ha ido marcando el concejal del PP en el Ayuntamiento de Camponaraya, Javier Folgueral. Y Emiratos Árabes en un principio, Irán después y ahora China han comenzado a dejarse conquistar sobre todo «por las personas con proyectos más que por una zona que tenga infraestructuras», dice Folgueral, satisfecho de su trabajo. Reconoce que lo ha hecho en solitario, con el apoyo de su partido por detrás pero poniendo su esfuerzo y dinero en conseguir que otros aprovechen el gran potencial que ve en el Bierzo. Lo más interesante está, asegura, en «todo lo que está alrededor de la minería. Nos ha dejado sectores tremendamente especializados en calderería, en metal, en construcción... y eso se valora mucho».

Delegados de la embajada de Emiratos Árabes ya han visitado la comarca para compartir esas ideas empresariales y estudiar su participación en las mismas. El interés de Emiratos está en la agroalimentación, porque parte de una zona desértica que necesita importar frutas y verduras. Desde Irán, sin embargo, los contactos, ya formales, se basan en la calderería fundamentalmente y la construcción. Folgueral asegura que ya hay un proyecto sobre la mesa cifrado en 20 millones del que no puede descifrar más claves por la confidencialidad que ha firmado con los empresarios, pero que considera que será un paso importante para iniciar ese intercambio empresarial por el que trabaja. Es más, si en principio su intención era abrir vías a los productos bercianos en el exterior y atraer inversores, ahora se han sumado Astorga y Galicia a su propuesta «Galicia quiere comercializar sus productos enlatados como mejillones o atún y Astorga fabricación de productos metálicos». Del Bierzo se requieren esas empresas especializadas y también piedra, pizarra, pero sobre todo, asegura que lo que busca Irán, que posiblemente será el primer país en formalizar algún tipo de acuerdo empresarial, son proyectos «son gente muy noble que sabe el valor de las ideas. Buscan proyectos viables que no se hayan podido ejecutar en la zona por falta de efectivo. Ahora están en la fase deinversión, pero será un proyecto bonito», dice Folgueral que adelanta que podría darse a conocer formalmente en el segundo semestre del año como muy tarde «incluso creo que se adelantará», augura.

Folgueral espera que en las próximas semanas, delegados de Irán visiten a empresarios bercianos, tras una primera reunión que ya han tenido con el delegado de la Junta, Guillermo García.

Con China las relaciones se basan más en la agroalimentación «estoy intentando que empresarios de la zona firmen acuerdos con distribuidores chinos», dice Folgueral «todas las semanas sale un tren con productos españoles a China y en él tienen que ir productos bercianos», dice.

Vía de entrada pero ¿de salida?


Folgueral proyecta intercambios empresariales. Una línea que se pueda usar tanto para recibir inversiones como para estudiar encajar proyectos fuera. Pero esa vertiente, que también considera muy interesante, es menos asumida por los empresarios bercianos «nos gusta nuestro círculo de confort y es difícil que salgan», dice. Sí apunta que los empresarios locales situados en una franja de edad de entre 25 y 40 años son más receptivos a salir. Apunta que, de hacerlo, él estará pendiente para que sus inversiones sean seguras. Sobre todo les pide que examinen las posibilidades sin prejuzgar, ya que muchos recelaban de las relaciones con Irán y, sin embargo, para Folgueral son firmes y honorables «les interesa la experiencia empresarial, la preparación y aquí la tenemos incluso sin darle valor. Además tenemos empresarios que saben medir los riesgos», apunta. Algunas embajadas reconoce Folgueral que se le están resistiendo. Aunque no quiere ir en contra de la posibilidad de que esa postura cambie dando sus nombres sí apunta que son aquellas de países menos desarrollados que España «con carencias sociales y de infraestructuras notable», dice. 


45% de éxito


En las relaciones abiertas, Folgueral se marca un 45% de éxito, es decir de empresarios «que se van a involucrar» con proyectos. Irán ya lo da por hecho y espera que este año haya algún proyecto en el Bierzo que está negociando y del que solo aporta que será importante a nivel económico, no tanto laboral. Para Folgueral será un primer paso para la recuperación berciana en la que ha querido contribuir «varias empresas han mandado documentación y creo que es un avance».Mientras otros se han cruzado de brazos, «creo que teníamos que salir a enseñarnos», defiende.
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