El Abanca Ademar buscará dar otro paso más hacia la clasificación para los cruces de la Liga Europea precisamente en la capital del balonmano continental, Viena, donde espera un Fivers que tras el sorteo parecía el equipo más débil del grupo, pero que ha demostrado ser capaz de todo, sin nada que perder y con mucho margen para sorprender.Apenas cuatro kilómetros separan la sede de la Federación Europea de Balonmano del barrio de Margareten (el distrito 5, de ahí el nombre del equipo), sede de un Fivers que marchaba como líder en el momento en el que la pandemia obligó a cancelar la liga austriaca el pasado mes de marzo. Eso le valió al conjunto vienés su regreso a Europa, donde el camino hasta la fase de grupos no ha sido ni fácil ni exento de polémica. Porque si en la primera ronda el Fivers daba la gran sorpresa eliminando al Benfica remontando dos goles en casa (64-62 en el global), en lasegunda, la negativa de la consejería de Sanidad de la Comunidad Valenciana al viaje de Benidorm a Viena para disputar el partido de vuelta (los alicantinos ganaron 34-31 en la ida) les daba la eliminatoria por ganada pasando a una fase de grupos en la que cayó con claridad en Plock (32-23) y por la mínima en casa ante el Chekovskie (30-32), donde fue capaz de vencer con relativa comodidad al Toulouse (37-32).
Un equipo por tanto capaz de lo mejor, pero que también ha mostrado ser muy irregular ya que en liga ha perdido sus tres últimos partidos, incluyendo el derbi de la capital ante el West Wien (35-28), disputado hace 10 días y que ha sido el último compromiso del equipo que dirige desde hace 10 temporadas Peter Eckl, que detectó un caso de coronavirus que le ha obligado a aplazar sus dos últimos encuentros ante Metalurg y Ferlach.
El Fivers venció a Toulouse y Benfica en casa, pero ha perdido sus tres últimos partidos de liga en AustriaUn club de cantera, en el que todos los jugadores del primer equipo son austriacos y formados en las categorías inferiores con la única excepción del portero Filzwieser. Entre ellos, varios internacionales que estuvieron con su selección en el último Europeo y apuntan a repetir presencia en el Mundial como el pivote Wagner, el extremo zurdo Brandfellner o el máximo goleador del equipo, el lateral izquierdo Hutecek. Este último lidera una primera línea muy peligrosa con Glätzl, Martinovic o Stevanovic, pero con la importante baja por lesión del capitán Markus Kolar.
Sin embargo, volverá a mirar el Abanca Ademar más a sí mismo que al rival de cara a intentar llevarse la victoria de Viena en el que será el primer partido de una semana con muchas horas de viaje y tres partidos. Llega lanzado el equipo leonés a la cita y buscará aprovechar esa inercia no solo para seguir creciendo en resultados, sino también en sensaciones. No brilló el conjunto de Manolo Cadenas en su último partido ante Guadalajara como había hecho en fechas anteriores y mantenerse alejado de nuevo de las dudas en una semana con tanta carga de partidos se antoja clave.
Con las bajas de Carrillo y Antonio Martínez, deberá afrontar más que justo en los extremos los 180 minutos de partido que le esperan por delante a los leoneses durante la semana, en la que a buen seguro todos los jugadores tendrán oportunidad de reivindicarse. Piechowski o Gostovic, que venían teniendo pocos minutos y ante Guadalajara cuajaron una buena actuación, tendrán hoy la oportunidad de demostrar por qué merecen más minutos. Igualmente, los Natan, Marchán o Lucin buscarán seguir siendo tan determinantes como en las últimas fechas con el ojo también puesto en una defensa que ante Guadalajara volvió a encajar 30 goles de nuevo con problemas en un centro de la defensa que había funcionado bien en la gran racha de resultados que venía firmando el conjunto de Manolo Cadenas.
El encuentro, que se podrá seguir por televisión a través de DAZN y la televisión local, será dirigido por los colegiados alemanes Baumgart y Wild.